El Barrio Naval, otra vez sin agua

Vecinos del barrio Naval de Quilmes volvieron a sufrir problemas con el suministro de agua corriente por una decisión del consorcio que, para abastecer a la gran cantidad de vivienda, habilita el servicio solo durante la noche. No es un problema nuevo, pero tuvo una solución parcial el año pasado luego de la queja de las familias afectadas. Sin embargo, desde hace meses la práctica del consorcio volvió a implementarse. Una lugareña explicó que “el consorcio corta el servicio durante el día para que las torres –dentro del mismo barrio- tengan agua y recién a las 8 de la noche el resto puede tener agua”. El fin de semana se hizo una reunión para exigir una solución pero el consorcio dijo que el encuentro fue “ilegal”, comentó la vecina. La vivienda de la lugareña, por este mismo problema, sufrió la rotura del termotanque hace un año. Actualmente debe aprovechar las horas de agua en la noche para llenar baldes que utiliza durante el día para las actividades cotidianas. “Si te ocurre un imprevisto no tenés a quién recurrir”, se quejó. Los reclamos a la empresa AySA ya fueron hechos pero la distribuidora de agua corriente sostuvo que es un problema del barrio.

Vecinos del Barrio Naval de Quilmes volvieron a sufrir problemas con el suministro de agua corriente por una decisión del consorcio que, para abastecer a la gran cantidad de vivienda, habilita el servicio solo durante la noche.
No es un problema nuevo, pero tuvo una solución parcial el año pasado luego de la queja de las familias afectadas. Sin embargo, desde hace meses la práctica del consorcio volvió a implementarse.
Una lugareña explicó que “el consorcio corta el servicio durante el día para que las torres –dentro del mismo barrio- tengan agua y recién a las 8 de la noche el resto puede tener agua”.
El fin de semana se hizo una reunión para exigir una solución pero el consorcio dijo que el encuentro fue “ilegal”, comentó la vecina.
La vivienda de la lugareña, por este mismo problema, sufrió la rotura del termotanque hace un año. Actualmente debe aprovechar las horas de agua en la noche para llenar baldes que utiliza durante el día para las actividades cotidianas. “Si te ocurre un imprevisto no tenés a quién recurrir”, se quejó.
Los reclamos a la empresa AySA ya fueron hechos pero la distribuidora de agua corriente sostuvo que es un problema del barrio.

Compartir