La Cena Solidaria de Nochebuena se realizó como todos los años en la Catedral Inmaculada Concepción de Quilmes, donde alrededor de 140 personas que se encuentran solas o en situación de calle compartieron la significativa velada a la espera de la Navidad con monseñor Carlos Tissera, obispo de la Diócesis, quien brindó su bendición.
Asimismo, 40 servidores trabajaron para la organización; se destacó la cantidad de donaciones de los vecinos de todo el distrito que permitió que cada uno de los comensales se llevase una vianda para la mesa navideña.
Como hace ya seis años tuvo lugar la cena solidaria de Nochebuena que se hace merced a las donaciones de los fieles en la sede de Mitre y Rivadavia.
El Obispo quilmeño explicó que «junto con la cena se les entrega una vianda a cada una de las personas para que tengan comida en la mesa de Navidad», posteriormente a dar la bendición a todos los presentes.
En el atrio de la Catedral, se convocaron cerca de 140 personas que llegan desde distintos barrios de Quilmes, de Florencio Varela y de Berazategui para compartir con otros fieles una cena tan especial como la de Nochebuena.
Una de las coordinadoras de la propuesta que se lleva adelante hace años, dijo que «en cada oportunidad vamos mejorando y nos sentimos felices por las donaciones de los vecinos, la ayuda de la gente, la participación de todos en pos de un fin solidario que es el compartir entre todos la Nochebuena. A cada asistente se le entregó una vianda para la Navidad; hemos tenido sandwiches de miga, pollo, carne asada, empanadas, gaseosas, helado, pan dulce, todo lo necesario para compartir una hermosa cena».
En diálogo con este medio, monseñor Tissera enfatizó que «vemos que la gente asiste con alegría pero que lamentablemente es creciente el número de asistentes y refleja que la situación de pobreza está aumentando en nuestros barrios y eso nos preocupa, pero es emocionante ver el trabajo de los servidores, voluntarios que resignan tiempo a sus familias y lo ponen al servicio de los demás, eso reconforta el alma».
Mensaje de los Obispos
Tanto monseñor Tissera como su par Marcelo Margni señalaron en un mensaje que «en un país de sombras, una luz brilló. En el esperanzador tiempo navideño, nuestro corazón presiente una buena noticia y nuestra mirada se fija en el pesebre. La Navidad, para la mayor parte de nuestro pueblo, es un canto a la vida».
«Al mismo tiempo, el Dios hecho hombre nos recuerda cuánto vale cada ser humano. Así nos convoca a luchar por la justicia, a construir la amistad social, y a ser solidarios con los más pobres. Los últimos de la sociedad son los que más sufren por las dificultades económicas que vivimos. También son los más afectados por la inseguridad, porque no tienen recursos para defenderse. Además, la inequidad es una causa permanente de violencia y América Latina es el lugar del planeta donde hay mayor inequidad».
«A treinta y cinco años de la recuperación de las instituciones de la República, quisiéramos proponer una democracia que no olvide las auténticas raíces cristianas y culturales, y que cuide especialmente el trabajo y la educación»; indica el comunicado con contenido social que denuncia la situación que se vive en algunas zonas de Quilmes, Florencio Varela y Berazategui.
