El Gran Premio de España de Fórmula 1, disputado el 9 de mayo de 1993, dejó algo histórico: Alain Prost, Ayrton Senna y Michael Schumacher, los tres compartieron el podio por primera y única vez.
A esta competencia, el brasileño Senna llegó como puntero del campeonato, ya que había ganado dos de las cuatro primeras fechas de la temporada.
En esa carrera, Damon Hill doblegó a Prost, su compañero de equipo en Williams quedó por delante de Senna y Schumacher. En la vuelta 11, después de que ambos Williams se escaparon del resto, el francés dejó atrás a Hill.
Después, el motor de Hill se rompió y Senna heredó la segunda colocación; mientras que Schumacher, que llegó a presionar al brasileño, se tuvo que conformar con el último escalón del podio.
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