Un refuerzo de lujo

El italiano Daniele De Rossi será presentado oficialmente como refuerzo de Boca el próximo lunes.
El mediocampista ayer realizó la revisión médica y aprobó el examen en perfectas condiciones.
El volante, de 36 años, tuvo una primera señal de lo que significa Boca al recibir el cariño de los hinchas tras su aterrizaje en el Aeropuerto de Ezeiza. Una multitud se dirigió al lugar y le brindó su apoyo al italiano.
De Rossi, histórico jugador de Roma, dejó todo listo para su presentación. Obviamente va a necesitar varios días de trabajo para poder pisar la cancha con el equipo dirigido por Gustavo Alfaro.
Sus compañeros le dieron la bienvenida en el entrenamiento en Casa Amarilla luego de haberle ganado 1-0 a Athletico Paranaense en Curitiba en el partido de ida de los Octavos de Final de la Copa Libertadores.
El campeón del mundo en Alemania 2006 no va a poder jugar en la vuelta del próximo miércoles en la Bombonera. Tampoco el domingo ante Huracán cuando debuten en la Superliga. Pero su llegada revoluciona a Boca.
El italiano, campeón del mundo en Alemania 2006, no podrá jugar la revancha de octavos de final ante Athletico Paranaense, pero podría ingresar a partir de Cuartos si el Xeneize avanza de ronda.
Su llegada al país conmocionó a todos los hinchas del Xeneize que sueñan con verlo con la camiseta puesta y que empiece a agarrar ritmo.
Cabe señalar que el futbolista se encuentra inactivo y deberá trabajar junto a los preparadores físicos para fortalecerse físicamente y estar a la altura de la circunstancias.
La salida del mediocampista Nahitna Nández, se irá a jugar a Italia, hace que en la mitad de cancha quede vacante un jugador aguerrido como De Rossi.
Entonces, el experimentado volante peleará por un lugar en el medio con Iván Marcona, Jorman Campuzano y Nicolás Capaldo.
Su desembarco al país no podría haberse cumplido sin el trabajo del director deportivo Nicolás Burdisso, que es amigo del experimentado futbolista -jugaron juntos en la Roma en desde 2009 hasta 2013-.
De Rossi cumplirá su sueño, que es compartido, y se pondrá la camiseta de Boca. Un refuerzo de lujo para el equipo de Alfaro que quiere quedarse con la Libertadores.