Ya no quedan más evacuados

Luego de la fuerte sudestada que sacudió la zona costera del distrito en la noche del miércoles y la madrugada de ayer, las condiciones meteorólgicas mejoraron notablemente y la situación volvió a la normalidad. Ardua tarea de los servidores públicos

La gran creciente del Río de la Plata en la noche del miércoles y la madrugada de ayer derivó en la evacuación de habitantes de la zona de la ribera. Asimismo, se llevó a cabo un gran operativo entre Defensa Civil, Bomberos Voluntarios de Quilmes y el Municipio.
Cerca de las 19.30 del miércoles, el agua comenzó a salir de su cauce y a las 23 ya se registraba una altura de 3,30 metros, lo que provoco que llegue hasta el terraplén de la Autopista Buenos Aires-La Plata., tal como lo reflejó Diario El Sol en su edición de ayer.
En consecuencia, horas antes comenzó a armarse el protocolo de rescate.
En tanto, el titular de Defensa Civil, Maximiliano Mendoza, manifestó que fue un trabajó arduo el que llevaron a cabo; además, explicó que hacía mucho tiempo que el río no salía con tanta fuerza.
“En Otamendi y 73 teníamos agua en bastante cantidad. Alrededor de 15 personas fueron trasladadas por personal de la Secretaría de Desarrollo Social comunal al Centro de Evacuados Santo Domingo, aunque todos ya volvieron a sus viviendas. Hace rato que no crece de la manera que lo hizo, el viento ayudó también”, declaró el funcionario.
Por otra parte, agregó: “a través de Bomberos Voluntarios y nosotros, conjuntamente pasamos tocando la sirena, alertando a los vecinos para que tomen conocimiento de la crecida”.
Cabe agregar, que el barrio lindante a la autopista está en pendiente, lo que provoca que cada vez que hay sudestada, llegué el agua con rapidez y se estanque.
No obstante, las tareas se estuvieron haciendo hasta altas horas de la madrugada.
Por suerte, la situación climática mejoró en la primera mañana, por lo que ayer el panorama estaba calmo, ya que el río estaba en bajada.

El titular de Defensa Civil de Quilmes, Maximiliano Mendoza, manifestó que fue un trabajo arduo (Foto: Luis Martin)
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