El feriado se trasladó al lunes 24, pero la fecha histórica conmemora la Batalla de la Vuelta de Obligado, un hito central en la defensa de la soberanía argentina.
El Día de la Soberanía Nacional se celebra cada 20 de noviembre en recuerdo de la Batalla de la Vuelta de Obligado, uno de los episodios emblemáticos en los que la Confederación Argentina defendió sus derechos territoriales y políticos frente a las potencias extranjeras.
En 2025, el feriado correspondiente fue trasladado al lunes 24 de noviembre, dado que la Ley 27.399 establece que esta conmemoración es un feriado trasladable. Además, el Gobierno nacional decretó el viernes 21 como día no laborable, conformando así un fin de semana extra largo para gran parte de la población.
Por qué se celebra el Día de la Soberanía Nacional
La fecha recuerda el enfrentamiento ocurrido el 20 de noviembre de 1845, cuando la Confederación Argentina, encabezada por Juan Manuel de Rosas en las relaciones exteriores, resistió el intento de Francia e Inglaterra de navegar libremente los ríos interiores con fines comerciales y políticos.
En el contexto de la Guerra Grande, las potencias europeas buscaban avanzar sobre el Río Paraná para establecer vínculos con provincias opositoras. Para impedir ese avance, Rosas designó al coronel Lucio Norberto Mansilla como responsable de organizar la defensa en el recodo conocido como Vuelta de Obligado, cerca de San Pedro.
Un combate desigual que marcó la historia
La batalla enfrentó a una flota anglo-francesa integrada por 22 barcos de guerra, 92 mercantes, 418 cañones y 880 soldados, frente a una fuerza argentina mucho más limitada: apenas seis barcos mercantes, un bergantín y 60 cañones de bajo calibre.
Para frenar el acceso enemigo, se dispuso un sistema de tres grandes cadenas cruzadas sobre el Paraná, sostenidas por barcazas—varias de ellas cargadas de explosivos—, con el objetivo de ralentizar y dañar el avance de los buques extranjeros.
El combate se extendió durante horas. Si bien la flota europea logró finalmente cortar las cadenas y continuar su travesía, el enfrentamiento dejó un saldo de más de 400 muertos y numerosos heridos del lado argentino. Las potencias extranjeras también registraron bajas significativas.
Una victoria política para la Confederación
Aunque la batalla fue desfavorable desde el punto de vista militar, su impacto diplomático fue decisivo. En los años posteriores, Francia e Inglaterra reconocieron la soberanía argentina sobre sus ríos interiores, lo que consolidó uno de los triunfos más importantes en materia de política exterior de la época.
Hacia 1850, las relaciones entre los países ya estaban normalizadas y el episodio quedó marcado como un símbolo de la defensa nacional.
La institucionalización de la fecha
La reivindicación de la Vuelta de Obligado tomó impulso en 1974, cuando el historiador José María Rosa propuso instaurar un día de conmemoración. Ese mismo año, el Congreso sancionó la iniciativa y la entonces presidenta María Estela Martínez de Perón la promulgó oficialmente.
En 2010, la fecha fue declarada feriado nacional durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, reforzando su relevancia en el calendario cívico argentino.




