La enfermedad cardiovascular continúa siendo la principal causa de muerte en el mundo, con 20,5 millones de fallecimientos al año, mientras que en Argentina ocurren 300 decesos por día a raíz de una patología que afecta en mayor proporción a mujeres mayores de 60 años y que puede prevenirse con el control de peso, del estrés, de la presión arterial y la diabetes, junto a una alimentación saludable y el ejercicio físico.
La Red Universitaria de Hospitales de la Universidad de Buenos Aires (UBA) junto con la Federación Argentina de Cardiología (FAC) brindaron datos sobre cómo afectan las enfermedades cardiovasculares.
Del total de muertes en Argentina en 2021, un 26,1% ser produjeron por afecciones cardiovasculares -la principal causa-, según estadísticas del Ministerio de Salud. «Si dividimos por sexo, las mujeres tuvieron un porcentaje mayor de muertes cardiovasculares con respecto a los varones, un 27,29 % contra el 24,52 %», indicaron las cifras oficiales.
Por eso, los especialistas apuntan a la importancia de la concientización y prevención de la enfermedad cardiovascular en la mujer, indicó la médica de la división Cardiología del Hospital de Clínicas de la UBA, Analía Aquieri.
La enfermedad cardiovascular tiene mayor incidencia a partir de los 60 años «cuando la mujer se encuentra en la menopausia, ya que no tiene el ´efecto protector´ de los estrógenos (vasodilatación de los vasos sanguíneos, descenso del colesterol malo) y comienza con aumento de los factores de riesgo cardiovascular como la dislipemia (colesterol alto), hipertensión arterial (presión alta) y hay mayor sedentarismo, trastornos psicosociales como estrés, depresión», sostuvo Aquieri.