La Licenciada Laura Isanta fue parte de la 44º Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, sin dudas un hecho más que trascendental en su vida, ya que presentó allí su nuevo libro “Apreciatividad: el arte de percibir lo valioso”.
Con relación a esto, y en diálogo con Urbana Mix, la especialista quilmeña señaló que la experiencia “resultó rara porque son esas cosas que uno no sueña nunca en la vida. Yo soy muy lectora y respetuosa de los escritores, o sea estar de este otro lado es algo que yo no hubiera imaginado muchas veces en la vida. La Feria es un lugar al que voy todos los años y jamás pensé en estar sentada del otro lado. Lo viví con mucha presencia, tenía muy presente en donde estaba, porque uno a veces no es consciente del momento con la vorágine. Había mucha gente querida, lo disfruté mucho, y me di cuenta de algo que no había tomado conciencia”, expresó Isanta, quien inmediatamente agregó: “escribí mi libro con la intención de que llegue a muchas personas y sea útil para la vida de estas personas, incluso para cambiar ciertos patrones culturales. Y hubo dos escenas que me marcaron ese día… Primero una madre que me vino a contar que el libro lo había tomado prestado su hija de 15 años; jamás pensé que el libro podía ser para una chica de esas edad. Y al rato un padrino con su ahijada, la nena tenía unos 14 años y también tenía el libro. El mayor regalo que me dejó la Feria es saber que cuando uno escribe, en este caso, la llegada es muy amplia y es una enorme responsabilidad. Llegué a un lugar al que jamás pensé que iba a llegar”, indicó la autora que también se dedicó a firmar ejemplares y responder consultas en torno a esta obra que llega gracias a Ediciones Granica.
Todo un arte
En pocas palabras, e intentándonos aproximar al concepto, podríamos decir que la apreciatividad es “el arte de percibir lo valioso”. Pero, en este caso, qué mejor que conocer la definición de esta profesional acerca de un término que viene ganando terreno: “la apreciatividad es una habilidad que todas las personas tenemos, una habilidad de la que los grandes líderes hablaron toda su vida. No nació ayer pero sí está naciendo hoy el foco en entrenarla y desarrollarla, entonces yo te hago un modelo para este entrenamiento porque si bien tenemos una cuota de apreciatividad todos, la cultura y la educación va deteriorando esto en muchos casos, es decir que no siempre lo va haciendo crecer. Entonces el entrenamiento es un reconectar con esta capacidad no solo porque nos haga sentir mejor sino porque tiene impacto directo en muchas cosas palpables de la vida, como son los logros, los resultados, un menor aprecio con nosotros mismos, menores posibilidades de conseguir muchas cosas que deseamos, menor aprecio hacia las personas que nos rodean…seguramente todo eso se traduce en relaciones menos saludables y cuando no somos capaces de capturar las bondades del mundo a nuestro alrededor, tampoco somos capaces de capturar posibilidades”, manifestó Isanta.
Asimismo, aclaró un aspecto importante: “eso que parece una cosa light, si se quiere tiene impacto en las cosas duras que vemos todos los días y las que estamos buscando pero no sabemos buscarlas por este camino, no porque no sea bueno sino porque no lo conocemos”.
Mientras que también subrayó: “hay otro mito súper importante y es que la apreciatividad facilita las conversaciones difíciles, un tema que pocas personas también conocen. Mucha gente cree que apreciar y valorar sería hablar solo de lo positivo. En verdad cuando me siento apreciado y valorado me abro más a contar, por ejemplo, lo que me molesta de vos o las cosas que querría que mejoremos en nuestra relación. Hay muchos estudios que muestran cómo las prácticas apreciativas en realidad facilitan las relaciones saludables no solo focalizándose en lo positivo, sino habilitando espacios para hablar saludablemente de lo negativo”.
Sobre Laura Isanta
La profesional quilmeña es diplomada en Felicidad Organizacional de la Universidad Adolfo Ibáñez (Chile) y Diplomada en Psicología Positiva. Coach Certificado. Especialista en Indagación y Diálogos Apreciativos (Appreciative Inquiry). También es Directora del Instituto del Bienestar – Sede Argentina, y Directora de la consultora Laura Isanta, Appreciative Consulting.
Es autora del libro “Apreciatividad, Una habilidad que se ejercita en la vida y el trabajo”. Creadora del Modelo ACOM para el desarrollo de la apreciatividad y del THA – Test de Habilidades Apreciativas.
Asimismo es autora y facilitadora del primer curso de Habilidades Apreciativas de Latinoamérica y del primer curso en español de Inteligencia Apreciativa avalado por T. Thatchenkery. Ha facilitado procesos de Diálogos Apreciativos y trabajado su modelo ACOM en importantes empresas de diferentes países tales como Givaudan, Movistar, Naranja, Banco Ciudad, Basf, Nokia, Banelco, Essen Aluminio, Telefé, Panavial, Beiersdorf, Ernst & Young, AUSA, entre otras.
“Gracias a todos los que acompañaron este lanzamiento con su presencia y con su corazón. Un nuevo nacimiento y una experiencia soñada”, expresó la autora acerca de su participación en la Feria del Libro de Buenos Aires. Cabe destacar que el libro se desarrolla sobre el concepto de “Apreciatividad” entendido como la capacidad de tomar consciencia de la importancia de lo que sabemos que tiene valor. “Cuando somos apreciativos con nosotros mismos, se eleva nuestra autoestima y eficacia; y cuando somos apreciativos con los otros, mejoran la calidad de nuestras relaciones”, propone Isanta
“La Felicidad Organizacional es un tema que en los últimos años se está hablando mucho. Hay como dos líneas: una más ocupada de los placeres, los masajes, la alimentación saludable, y la otra que se ocupa más de cosas como el sentido de la vida, logros, motivaciones…”
“La Apreciatividad trabaja más la capacidad de que las personas puedan apreciar lo mejor de su trabajo básicamente, que es poder capturar lo mejor de lo que hay, lo cual no tiene nada que ver con negar lo que no funciona. Cómo hacemos para ser buenos buscadores de lo que sí funciona y construir el mejor futuro con lo que hay, ese es el tema”
“Lo que me gusta del mundo organizacional es que muchas personas descreen que sea posible desarrollar temas como felicidad, bienestar, y todo eso, y yo siempre digo que aunque sea poco siempre es más que nada. Todo trabajo me desafía a lograr más de lo que había cuando llegué”
Andrés Alcaraz
