“A veces la botella viene media llena y a veces media vacía, es según cómo la mires”, suele expresar un dicho popular. Aplicable a la realidad de Quilmes que los resultados y el juego se puede explicar “según cómo lo mires”.
Los seis puntos conseguidos sobre el final, cuando parecía sumar solo tres empates, en los últimos tres partidos: frente a Ferro 1-0 (minuto 85), Gimnasia de Jujuy (minuto 95) y Aldosivi 2-1 (minuto 91), sufrieron un descuento ante Brown de Adrogué. En el último partido los tres puntos que parecían en el bolsillo se esfumaron y solo pudo sumar uno por el empate 1-1 ante el Tricolor en el epílogo 1-1 (minuto 89).
No hay lugar para el lamento, en los últimos tres partidos había sido Quilmes el que se llevó el premio y en esta ocasión al menos hubo un reconocimiento para el conjunto dirigido por Pablo Vico que había hecho méritos para no perder ante el Cervecero.
De todas maneras los méritos no siempre están correspondidos por el resultado y el Cervecero que no había hecho un buen partido se quedaba con tres puntos que alimentaban su ilusión de darle alcance a los tres de arriba.
Si se analiza el rendimiento del equipo desde la tabla de posiciones, poco para reprochar. Si se lo evalúa dentro de la racha de seis partidos sin derrotas, mucho menos. Por lo que ahí la botella va a venir medio llena y se destacará las virtudes que mostró en otros encuentros y que no pudieron exhibirse ante un rival siempre complicado como lo fue Brown.
La irregularidad del rendimiento del equipo aún no ofrece garantías para estar metido en la gran pelea. El poco fútbol que muestra en varios partidos el equipo, no lo hace confiable para ser candidato.
Más allá de lo que suceda con la difícil carrera que tiene Quilmes con Independiente Rivadavia, Deportivo Maipú y Chacarita, lo importante será solidificar un equipo que pueda terminar de la mejor manera la fase regular.
Siempre en muy importante el final del torneo y lo será aún más en la previa del torneo Reducido y su tradicional “mata-mata”, en donde un mal partido tira por la borda toda la temporada futbolística.
El equipo deberá quitarse la presión de llegar al primer puesto e ir saldando deudas internas (corrigiendo errores básicos) para poder potenciar sus posibilidades de ascenso. Que no se entienda dejar de lado la chance de ir por todo, pero sí comprender que el proceso de recuperación de un equipo tendrá pasos adelante y pasos para atrás.
No todo será blanco o negro, también habrá grises y habrá que saberlos observar. Entender que la botella se puede ver de varias maneras pero lo importante será la transparencia del envase y más que nada el contenido; en eso habrá que seguir trabajando. Todavía falta.
