El técnico de la Octava de Quilmes, Hernán Schiaffini, que se consagró campeón del Torneo de la Primera Nacional de Divisiones Juveniles tras vencer en la final 3-1 a Juventud Unida de San Luis destacó la labor de sus dirigidos.
“Estoy muy contento por los chicos y por el club, es fruto de un año duro y largo. El equipo rival tenía mucho entusiasmo y nosotros jugamos un poco nervioso y podíamos haber jugado mejor. Pero las finales se juegan con un estado emocional elevado y a veces las toma de decisiones no son las que uno desea pero se ganó y es lo importante”, resaltó.
El entrenador destacó su relación con los juveniles: “uno va creando con los chicos casi que una relación familiar, al igual que con el club, por lo que este campeonato es una satisfacción pero soy consciente que los principales protagonistas son los chicos”.
El capitán Santino Baldassarri fue elegido el mejor jugador de la final y compartió su sentimiento. “Tengo una alegría inmensa por todo el trabajo que hicimos durante el año. Les agradezco a los que me eligieron, porque fue un partido muy difícil”.
Agregó: “luchamos mucho para poder conseguí este campeonato y los chicos rivales hicieron un gran partido y los felicito”.
“Le dedico el campeonato a mi familia: a mi mamá, a mi papa, a mis hermanos, a mis tíos y a todos mis abuelos”, cerró el jugador.
El presidente de Fútbol Infanto-Juvenil de AFA hizo un resumen de la temporada. “Estamos muy contentos cómo se desarrolló todo, desde el principio y hasta estas finales. El Torneo más complejo del fútbol argentino es el torneo de Juveniles de la Primera Nacional. Estoy muy agradecido a todas las instituciones que participaron y lo pudieron hacer posible”
El directivo indicó que “es un premio para los chicos, los técnicos, los formadores que trabajan en todas las instituciones y lo que estamos buscando es darles visibilidad al trabajo que realizan ellos para acompañarlos en la etapa formativa».
