Presos construyeron muebles

Internos de la Unidad Carcelaria 31 de Florencio Varela armaron mesas y sillas que fueron donados a un jardín de infantes que había perdido todo en un incendio. "Se trata de un gesto de caridad que fomentamos", dijo el director de la cárcel

El Jardín Comunitario Rinconcito de Luz sufrió un incendio el pasado 8 de septiembre y, desde entonces, internos alojados en el Penal de Varela decidieron colaborar desde su lugar para restablecer la actividad educativa inicial.

Los privados de libertad elaboraron en la primera etapa 24 sillas y 5 mesas en los talleres de carpintería con materiales reciclados gestionados por autoridades de la Unidad Carcelaria y el aporte de insumos y materia prima.

200 niños
afecttados

Cabe recordar que, el domingo 8 de septiembre en horas de la madrugada, el Jardín Comunitario Rinconcito de Luz, Monte Tartaglia, ubicado en el kilómetro 34 Ruta 3, de la localidad de González Catán, municipio de La Matanza, ardió completamente en llamas, afectando la asistencia a más de 200 niños.
“Para los internos fue una experiencia reconfortante. Se trata de un gesto y acto de caridad que fomentamos desde los establecimientos carcelarios, para que se pueda poner en práctica lo que se enseña en los talleres y en los cursos de capacitación laboral”, sostuvo el director de la Unidad 31, Alberto Saravia.

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