Un agente de la Policía Local de Berazategui, de 25 años, sufrió un grave ataque de nervios después de discutir con su pareja y amenazar con quitarse la vida mientras sostenía a su hija de 9 meses. El incidente tuvo lugar en la calle 353 al 700, en la localidad de Ranelagh, generando un despliegue policial para controlar la situación.
Según informaron fuentes policiales, la discusión con su pareja, una joven de 22 años, llevó al oficial a un estado de gran agitación emocional, durante el cual expresó su deseo de suicidarse. Al recibir un llamado al 911, el Comando de Patrullas de Berazategui acudió al lugar y encontró al oficial con su hija en brazos, con una pistola en la cintura, amenazando con acabar con su vida.
Los agentes del Comando de Patrullas actuaron con rapidez y profesionalismo, logrando persuadir a su compañero para que desistiera de sus intenciones suicidas y entregara tanto a la niña como el arma. Se trataba de una pistola Bersa 9 milímetros con un cargador cargado con 15 proyectiles intactos, la cual no había sido manipulada.
Una vez controlada la situación, el policía fue trasladado para recibir atención médica y se contactó a Asuntos Internos de la Policía para iniciar una investigación sobre el incidente. Además, se abrió un proceso de asistencia de salud mental para el agente y su familia, con el objetivo de brindar el apoyo necesario durante esta difícil situación.
La UFI Nº 4 de Berazategui, a cargo del caso, ordenó el secuestro del arma y está investigando los hechos para determinar el curso de acción adecuado. La situación también ha puesto en alerta a las autoridades locales, quienes recalcan la importancia del bienestar emocional y el apoyo psicológico para los oficiales de policía y sus familias.
Este incidente destaca la necesidad de abordar la salud mental en las fuerzas de seguridad, y refuerza la importancia de contar con protocolos de intervención para evitar tragedias derivadas de situaciones de estrés extremo o violencia doméstica.
