El tenista Novak Djokovic se pronunció a través de sus redes sociales y negó que haya sido «egoísta, difícil e ingrato» al hacerle sugerencias al director Craig Tiley para aliviar las restricciones de cuarentena antes del comienzo del Australian Open.
«Mis buenas intenciones para mis compañeros competidores en Melbourne fueron malinterpretadas como egoístas, difíciles e ingratas. Esto no podría estar más lejos de la verdad. Realmente me preocupo por mis compañeros jugadores y también entiendo muy bien cómo se maneja el mundo y quién se hace más grande y mejor y por qué», expresó el serbio, quien ha ganado ocho veces el Australian Open.
Y agregó: «me gané mis privilegios por las malas y por eso me resulta muy difícil ser un mero espectador sabiendo lo mucho que me importaba cada ayuda, gesto y buena palabra cuando era pequeño e insignificante en el orden jerárquico mundial. Por lo tanto, uso mi posición de privilegio para servir tanto como pueda donde y cuando sea necesario».
El número uno del mundo añadió de su correspondencia con Tiley: «en nuestro intercambio de correo electrónico aproveché una oportunidad para intercambiar ideas sobre las posibles mejoras que se podrían hacer a la cuarentena de los jugadores en Melbourne que estaban en total bloqueo».
Por último, el experimentado tenista comentó: «todos vinimos a Australia para competir. No poder entrenar y prepararnos antes de que comience el torneo no es realmente fácil. Ninguno de nosotros cuestionó los 14 días de cuarentena a pesar de lo que dicen los medios de comunicación».
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