Más de 500 docentes de la Universidad Nacional Arturo Jauretche firmaron una carta de respaldo al Gobierno Nacional, denunciando que «las fuerzas opositoras» no aceptaron «plenamente» el resultado de las elecciones y, «lideradas por los grandes medios hegemónicos, se esfuerzan por atacar al gobierno nacional en el plano cambiario, en la táctica obstruccionista en el Parlamento, en incentivar las dificultades propias de la pandemia, en negar la crisis en que dejaron a nuestra Nación».
La carta fue enviada este martes al ministro de Educación Nicolás Trotta, al secretario de Políticas Universitarias, Jaime Prezyk y al presidente del bloque de Diputados del Frente de Todos, Máximo Kirchner.
El rector Ernesto Villanueva aseguró que la carta firmada por 552 docentes de la UNAJ, representa un «compromiso que tenemos con una transformación que haga más justo nuestro país».
«Sin haber aceptado plenamente su derrota, las fuerzas opositoras, lideradas por los grandes medios hegemónicos, se esfuerzan por atacar al gobierno nacional en el plano cambiario, en la táctica obstruccionista en el Parlamento, en incentivar las dificultades propias de la pandemia, en negar la crisis en que dejaron a nuestra Nación», señala el comunicado.
Y sigue «por ello, deseamos reiterar nuestro apoyo a la orientación general que se lleva adelante desde el 10 de diciembre del año pasado en el entendimiento que sólo una política a favor de paliar las enormes desigualdades existentes, el desempleo y la inseguridad, es capaz de llevar bienestar a nuestra población».
Asimismo, «es obvio que quienes más tienen, más deben aportar. Todos y todas estamos haciendo sacrificios en nuestros ámbitos de trabajo y de estudio. Estos sacrificios no son en el vacío porque hemos contado con el acompañamiento del Estado a través de distintas políticas. Esperamos igual actitud de entrega por parte de todas y todos los argentinos. Si queremos una nueva normalidad, no será reiterando privilegios y beneficios en contra de los que apenas subsisten».
La carta es interpretada por los docentes como «un llamado a que sigamos poniendo el hombro, en la cátedra, en el territorio, y aquellos que militan, en los sindicatos, en los partidos, en los movimientos sociales, todas, todos, buscando una Patria mejor. La bandera argentina debe ser símbolo de mejora y no de facciones».
