El Partido de la Victoria sufrió la irreparable pérdida de su máximo conductor, el senador provincial Aldo San Pedro, quien había logrado asumir ese cargo el 11 de diciembre.
El presidente del Partido de la Victoria por Quilmes, Rubén Elías, hizo saber además, que «el partido está conformado de acuerdo a las normas electorales vigentes y tiene representación legal en 16 provincias del país, con su correspondiente Personería Gremial y sus autoridades debidamente designadas».
Elías recordó que «todo comenzó en 2001 cuando Néstor Carlos Kirchner lanza en el partido de Dolores, La Corriente. Antes de consolidar el Frente para la Victoria, se conforman los cinco partidos que posteriormente pasarían a integrar el Frente para la Victoria, porque Néstor Kirchner sostenía que no alcanzaba solamente con el peronismo. Fue así que le encomendó al Gaucho San Pedro la creación del Partido de la Victoria, quien en su viejo Ford Falcon se recorrió las provincias argentinas logrando representatividad en la mayoría de ellas. Eso sirvió para que a fines de 2002, principios de 2003, pudiera conformarse el Frente para la Victoria, integrado por el Partido de la Victoria, el Frente Grande, el Partido Justicialista, el Polo Social y Nuevo Encuentro».
Un luchador
Asimismo, dijo que con la muerte de Aldo San Pedro el Partido de la Victoriasufrió «la pérdida de un cuadro integral con una visión estratégica importante», ya que comienza con un candidato que en ese entonces carecía de intención de voto. «En ese entonces Aldo San Pedro era el presidente de la Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires, con la alianza en dicha provincia», destacó Elías.
«Sorteados los pasos electorales, con la asunción de Néstor Kirchner como Presidente de la Nación, San Pedro asume como vicepresidente segundo del Senado de la provincia de Buenos Aires. Cabe destacarse que después de ese período asumió, por la mayoría del voto de los vecinos, como intendente de la ciudad de Bragado en la provincia de Buenos de Buenos Aires. Aldo San Pedro, una vida comprometida con la gente; un testimonio de lucha por una causa noble; un verdadero ejemplo de vida austera que duele a quienes supieron acompañarlo y una pérdida para la política nacional», concluyó.
