El técnico de Quilmes, Darío Franco tuvo una particular visión de lo ocurrido en la derrota ante Temperley por 1-0 al señalar que el equipo no jugó un mal partido, tras acumular su tercera derrota consecutiva en el torneo.
“No creo que hayamos jugado un mal partido, tampoco jugamos bien. El equipo compitió sin tener la frescura que nos sigue faltando, jugamos un poco mejor que contra San Miguel pero nos vuelven a anotar un gol en el segundo tiempo. No podemos reaccionar, más allá de algunas aproximaciones. No queda mucho más por decir. Tenemos una semana larga y la tenemos que aprovechar para trabajar y levantar el estado anímico de los muchachos, que es lo principal”, señaló el entrenador Cervecero.
Franco agregó: “sin jugar bien tampoco hicimos un mal partido, siempre se analiza con el resultado y por eso se cree que se jugó muy mal, no queda más que seguir trabajando. Es un momento difícil porque llevamos tres derrotas consecutivas pero hay que mirar para adelante y pensar en el partido que viene y trabajar, no conozco otro camino”.
Con respecto al desarrollo del partido comentó que “tuvimos algunas aproximaciones en el primer tiempo, no en el segundo que no pateamos al arco. Que diga que hicimos un buen partido no quiere decir que no sea conscientes del momento que estamos pasando, no conozco otro camino que insistir con lo que venimos haciendo, buscando variantes y soluciones. Espero que los jugadores que vayan a llegar nos ayuden a tener mejores partidos”.
Además, el entrenador Darío Franco resaltó la entrega que hubo en el campo de juego de parte de los jugadores, “la actitud del equipo fue buena, fue un partido trabado y a lo mejor lo perdimos desde el juego y no desde la actitud. No pasó por falta de reacción de los jugadores. Este momento pasa por una falta de confianza del grupo y eso hace que se vea lo que se vio. Por ejemplo que no pudimos reaccionar después del gol; son rachas y esperemos que esto pase rápido”.
