¿El paciente está curado?

La formación inicial del equipo de Quilmes
El equipo inicial que jugó ante Aldosivi

¿El paciente está curado?

Quilmes luce recuperado. Los últimos tres triunfos al hilo (Aldosivi, Gimnasia de Jujuy y Ferro), más los cinco partidos sin perder (empate con Riestra y victoria ante Racing), avalan la rehabilitación de un equipo que parece haber dejado atrás un momento de crisis.

Además, tres de esos cuatro partidos ganados fueron en el interior del país, donde ganan los equipos que son candidatos al título. Quilmes lo hizo en Córdoba, Jujuy y Mar del Plata. Esta gran cosecha de puntos, renovaron las ilusiones y le devolvieron la confianza al hincha.

Parece muy lejano aquella sentencia de la gente para con los jugadores en la derrota ante Atlanta en el Centenario, donde fueron despedidos entre silbidos e insultos. Aquel pudo haber sido el último vestigio de la mala racha.

Luego de la última victoria ante Aldosivi agónica, como ante Ferro y Gimnasia, ya la discusión del “como” quedó atrás. Los debates son estériles ante los 13 puntos sobre 15 que consiguió el equipo de Mario Sciacqua.

Poco espacios queda para los “cuestionadores seriales” ante un equipo que esta vez no dejó margen para la duda sobre el merecimiento de lograr el triunfo, si es que eso finalmente es lo importante.

Ahora se destaca la “personalidad” o “carácter” del equipo, su renovada potencia ofensiva, el arribo de Iván Ramírez “para darle equilibrio al mediocampo”, la nueva dupla de marcadores centrales, las apariciones de Colman y hasta otra vez se resalta “la jerarquía” de algunos de sus jugadores, como si la hubiesen perdido.

De todas maneras, el equipo necesita darle continuidad a todo lo bueno demostrado en los últimos partidos. La extensa crisis, por la que pareció haber pasado, aún dejó secuelas en la tabla de posiciones.

Para meterse en la pelea por el primer puesto necesita seguir ganando. Es cierto que estos últimos resultados lo afirmaron en el grupo del Reducido y le devolvieron credibilidad, algo que no es poco para un equipo de la grandeza de Quilmes pero Independiente Rivadavía todavía está lejos.

Pero atención que hay que estar preparado para algún tropiezo más y en ese sentido no habrá que tirar todo abajo. La construcción puede seguir. En los últimos encuentros, el entrenador halló muchos aspectos positivos. Lo importante será terminar el año de la mejor manera, más allá si el paciente ya está curado y dejó atrás para siempre su enfermedad.

Compartir