El sacerdote católico Luis Farinello, el 8 de marzo de 1985, bendijo una cooperativa de viviendas ubicada en la avenida Hipólito Yrigoyen y Castelli.
El oriundo en Villa Dominico en el año 1937, fue párroco de Nuestra Señora de Luján, sita en los alrededores de Quilmes Centro, hasta el 2000. Además, el padre fue cura obrero y trabajó como albañil por siete años.
Durante la dictadura argentina, militó en la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos, en sintonía con los lineamientos pastorales del entonces obispo de Quilmes Jorge Novak.
Farinello abandonó este mundo en el 2018 y fue despedido en la Iglesia Caracol, donde el obispo de Quilmes, Carlos Tissera, junto al obispo auxiliar Maxi Margni y a otros sacerdotes de la Diócesis local, presidió la misa exequial.
