Cuando se alquila un local que quedó en desuso, es habitual que el nuevo inquilino encuentre restos y objetos del rubro que lo precedía. Pero lo que pasó en Florencio Varela trascendió lo normal, ya que cuando se disponía a realizar la limpieza correspondiente, un hombre halló algo impensado: un cohete Albatros de 70mm de uso militar.
La historia comenzó cuando un hombre decidió comenzar un emprendimiento laboral, por lo que alquiló un local en Sarmiento entre Avenida Novak y Tirania. Allí, el nuevo inquilino quería probar suerte con una pizzería.
Pero lo cierto es que cuando se hallaba realizando la limpieza del lugar, se encontró con un elemento explosivo, por lo que de inmediato dio a aviso a la Policía.
Rápidamente, se hizo presente en el lugar personal del Comando de Patrulla de Varela, al mando del comisario Sergio Martínez, que perimetró el lugar a la espera de Policía Científica en Explosivos.
Una vez arribados los especialistas, con el comisario inspector Oscar Nievas a la cabeza, inspeccionaron el cohete hallado en el negocio comercial, identificando al mismo como un Albatros de 70mm, que es de uso exclusivamente militar.
Así, se efectuó el protocolo de rigor, por lo que se procedió a trasladar y a destruir el mismo.
De esta manera, se hizo presente personal de la Dirección de Explosivos de Lanús, con los elementos provistos (traje protector) mientras que el comisario inspector Nievas y su personal a cargo, realizaron las primeras labores para lograr la estabilidad del artefacto.
Seguidamente, personal de Explosivos trasladó el cohete del local comercial a un móvil de especial, para entonces realizar el traslado, procediendo también el patrullero y los efectivos del Comando de Patrulla de Varela y Bomberos a su acompañamiento, para alojar el mismo en una tosquera ubicada en calle Montovani entre 1443 y Chivilcoy, donde personal idóneo preparó el explosivo tomando los recaudos del caso y seguidamente procedió a su destrucción.
