Se inhumaron en el Cementerio de Ezpeleta los restos de Carlos Agustín Falcón, detenido desaparecido desde el 27 de marzo de 1976, secuestrado en Bernal.
Su cuerpo fue identificado por el Equipo Argentino de Antropología Forense luego que fuera hallado como NN en el Cementerio de Moreno.
Falcón nació el 9 de marzo de 1945. Fue electricista en la fábrica Sampi y militante del Partido Socialista de los Trabajadores (PST).
Estuvieron presentes sus hijos y nietas, entre otros familiares. Además Mariela Fumagalli del Equipo Argentino de Antropología Forense, Tota Guede, Madre de Plaza de Mayo, Hugo Colaone, Secretario de Derechos Humanos de Quilmes, los Directores Generales de Violencia Institucional, Walter Ormazábal, de Derechos Humanos Rubén Schel, de Pueblos Originarios Julio Sosa y de Sitios para la Memoria Mariano Orellana. También integrantes de la APDH y del Colectivo Quilmes Memoria, Verdad y Justicia, entre otrxs.
En el homenaje, su hijo Luis Falcón agradeció a las autoridades municipales por el apoyo y la gestión realizada para posibilitar el traslado y dijo «Hoy es un día muy importante, tanto a nivel familiar como ciudadano, porque estamos despidiendo a un ser amado y cerrando un ciclo de incertidumbre y desvelo.Y a nivel ciudadano, con este acto se cierra un poco la herida de una democracia denostada en aquellos años nefastos de la historia Argentina. Carlos Agustín fue un joven delegado que luchaba por los derechos de sus compañeros padre de cinco hijos y sustento de su hogar. El cual fue secuestrado, torturado y asesinado, para luego dejarlo en una fosa común».
Los restos fueron depositados en la misma sepultura que Azucena Peralta, quien fuera su esposa y madre de sus hijos, fallecida en 2018, quien lo buscó incansablemente.