Irán ha lanzado un ataque sin precedentes contra Israel, utilizando drones y misiles en una respuesta directa al ataque a su embajada en Damasco. Este evento ha elevado la tensión en Medio Oriente al punto de una posible guerra total. Más de 300 drones y misiles iraníes sobrevolaron el espacio aéreo israelí esta madrugada, tras lo cual se desataron ataques en ciudades clave como Jerusalén, Tel Aviv y Haifa.
Las fuerzas de defensa israelíes, junto con la colaboración de Estados Unidos y el Reino Unido, lograron interceptar la mayoría de los misiles y drones, demostrando la eficacia del sistema de defensa «Iron Dome» y los aviones caza F-35. Sin embargo, la situación ha llevado a Israel a declarar alerta máxima y cerrar su espacio aéreo.
El presidente Joe Biden convocó una reunión de emergencia para abordar la situación y expresó su apoyo a Israel, destacando su capacidad para defenderse. Mientras tanto, el presidente argentino, Javier Milei, ha suspendido un viaje internacional para coordinar acciones con líderes occidentales.
Este ataque iraní es visto como una represalia por el ataque israelí a la embajada iraní en Damasco el mes pasado. La escalada de tensiones se produce en medio de otros eventos, como el secuestro de un buque por parte de la Guardia Revolucionaria iraní en el golfo Pérsico y las tensiones en la frontera de Gaza.
La situación ha llevado a Israel a tomar medidas precautorias, como la suspensión de actividades escolares y la limitación de reuniones al aire libre. Mientras tanto, Estados Unidos ha reiterado su compromiso con la seguridad de Israel y ha llamado a mantenerse al margen del conflicto.
