Por casi 10 años el Cervecero no pudo ascender y la leyenda cuenta que fue por el enojo de una bruja.
Desde 2012 hasta 2022, el Club Atlético Quilmes vivió una pesadilla interminable. Año tras año, el equipo luchaba por volver a la Primera División del fútbol argentino, pero siempre ocurría algo que frustraba el ascenso. Derrotas insólitas, fallos arbitrales polémicos y hasta errores increíbles en los últimos minutos de partidos clave alimentaron la leyenda de una supuesta maldición.
La historia se remonta al año 2012, cuando Quilmes lograba el ansiado ascenso a la máxima categoría. Sin embargo, en medio de los festejos, un dirigente del club tuvo un fuerte altercado con una mujer mayor que vendía estampitas cerca del estadio. Cuentan los testigos que la mujer, furiosa por el maltrato, lanzó una advertencia escalofriante: «¡Nunca más van a volver!». Desde entonces, la suerte del Cervecero cambió radicalmente.
En 2013, Quilmes descendió nuevamente. En los años siguientes, a pesar de conformar equipos competitivos y de llegar a varias finales del reducido, el ascenso se escapaba de manera increíble. En 2014, un penal errado en el último minuto; en 2016, un gol anulado de manera insólita; en 2021, la caída en la final contra Barracas Central en un partido lleno de polémicas arbitrales. Todo parecía indicar que algo más allá del fútbol estaba en juego.
Los hinchas, desesperados, comenzaron a investigar el origen de la maldición. Algunos buscaron a la misteriosa mujer para pedirle que levantara el hechizo, pero nunca más fue vista. Otros convocaron a curanderos y realizaron rituales en el estadio Centenario para cambiar la suerte del equipo.
Finalmente, en 2022, el Cervecero logró romper la racha y consiguió el ansiado ascenso. Para muchos, la maldición había terminado. ¿Casualidad o destino? Nadie lo sabe con certeza, pero lo que es seguro es que durante casi una década, Quilmes vivió una pesadilla digna de una historia de terror futbolera.