«La triste realidad del país»

El obispo Carlos Tissera, en un mano a mano con El Sol, indicó que "duele mucho…" el rápido crecimiento de la pobreza en medio del COVID-19. También se mostró muy preocupado por la post pandemia, especialmente con la franja de 0 a 14 años

El obispo de Quilmes, monseñor Carlos Tissera, afirmó en charla con El Sol que los índices oficiales de pobreza muestran «la triste realidad» que atraviesa el país y que apenas reflejan «el primer semestre del año, ya que la pandemia pegó fuerte en estos últimos tres meses. Además tenemos la incertidumbre que no sabemos cuándo termina todo esto del coronavirus».

La pobreza se ubicó en el 40,9 % al cierre del primer semestre, con un incremento de 5,5 % con respecto al 35,4 % de igual período de 2019, informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).

«Lo que está pasando no me sorprende, es la triste realidad del país de ayer, de hoy y de mañana. Es una realidad que duele mucho y más allá de los números hay gente muy necesitada en el Gran Buenos Aires y también en el interior del país», comentó Tissera.

Expresó que «la pobreza creció demasiado con el COVID-19 y hay que actuar rápido. Lo que me preocupa mucho es la post pandemia, especialmente con la franja de 0 a 14 años porque la alimentación y el ámbito de crecimiento son fundamentales en estas edades, teniendo en cuenta que la pandemia pegó fuerte en estos meses».

«Por este motivo, desde la Mesa del Hambre mejoramos la calidad de alimentación para estos chicos ya que trabajamos sobre tres ejes: la cobertura alimentaria, la calidad nutricional y el esquema de trabajo para la producción de alimentos. Pero sin la ayuda del Gobierno (Tarjeta Alimentar, IFE, etc.) tendríamos una realidad mucho más dolorosa…», indicó el Obispo de Quilmes.

Manifestó que «también fue fundamental el apoyo de Cáritas. Desde el inicio de la pandemia entregamos alimentos y elementos de higiene a más de 2.500.000 personas, duplicando la asistencia que bridamos a comunidades necesitadas de todo el país».

«La iniciativa #SeamosUno sirvió para sumar esfuerzos y cubrir las necesidades de quienes más están sufriendo la emergencia (es decir, llegar a aquellos que estaban en emergencia antes del virus y a los que entraron en emergencia por el virus). Y gracias todos los donantes, voluntarios, entidadades religiosas, empresas particulares, alcanzamos las donaciones necesarias para armar un millón de cajas y asistir a cuatro millones de argentinos en situaciones vulnerables», puntualizó también como presidente de Cáritas Argentina.

Incertidumbre…

Sobre la actual situación en el Área Metropolitana, remarcó que «me parece que el tema de los contagios se amesetó, pero tenemos la incertidumbre que no sabemos cuándo termina todo esto del coronavirus. Igualmente, el sector productivo recién comenzó a moverse un poco y no quiero dejar de destacar el apoyo de la gente para tratar de solucionar los problemas de todos los argentinos en medio del virus. Es fundamental el trabajo que hacen los comedores, las ONG, las redes…».

La escuela

«El tema de la escuela es algo muy complejo. Así como los chicos se tienen que alimentar también tienen que estudiar, aunque la movilización es muy difícil de implementar. Lo que me preocupa mucho es que hay gente que no se cuida y esto pone en riesgo a todos los demás y no pasa solamente en el Conurbano», señaló Tissera.

Seguidamente detalló que «ahora la situación no está nada fácil en el interior con el coronavirus, tengo gente conocida que me habla de lo que está pasando en Córdoba, también en Tucumán y está todo demasiado complicado…».

Por último, aseguró que «estamos en un momento muy particular del país y la gente ya está cansada de tanto aislamiento, pero a la vez no ayuda en nada cualquier tipo de enfrentamiento. Tenemos que buscar caminos para el entendimiento y mesas de encuentros para solucionar los problemas que tenemos».

La reapertura de actividades religiosas

El comunicado de la Diócesis de Quilmes sobre la reapertura de actividades religiosas: «Los obispos de Quilmes, Carlos José Tissera y Marcelo (Maxi) Margni, comparten con la comunidad diocesana que los municipios indicaron que desde la Provincia de Buenos Aires están trabajando en el decreto para la reapertura de las actividades religiosas».

«Se espera que la Provincia se expida en la próxima semana con las especificaciones y condiciones correspondientes en el territorio. Con las mencionadas precisiones, una vez que se publique el decreto, iniciaremos las prácticas según las posibilidades de las diferentes comunidades de la Diócesis de Quilmes».

Al respecto, Tissera en diálogo con El Sol manifestó que «la semana que viene vamos a conocer el protocolo correspondiente para celebraciones en lugares abiertos y también para las oraciones individuales. Nosotros tenemos gente de mucha edad, que forman parte de los grupos de riesgo y la Iglesia no puede controlar el distanciamiento social».

Una postal de la Catedral de Quilmes, ubicada en Rivadavia y Mitre
Compartir