Quilmes: No será una final, ni debe ser un final

El gol que recibió Quilmes
El gol del triunfo de Mitre ante la pasividad de los jugadores Cerveceros

Quilmes afrontará un partido clave para sus aspiraciones de ser candidato al ascenso a la Liga Profesional, cuando reciba a Chacarita el próximo sábado. No será una final y tampoco debe ser el final, pero sin dudas que podrá marcarle el camino a un equipo que parece deambular en este tramo del torneo.

El conjunto que conduce Mario Sciacqua anda desorientado por la Primera Nacional. El entrenador busca encontrarle respuestas a un equipo que no las da en el campo de juego. Todas las últimas pruebas táctica y la elección de jugadores en los últimos partidos no le han dado el resultado esperado. Sin embargo, el entrenador del Cervecero sigue buscando soluciones e intentando cambiar un equipo que no puede ejecutar el mensaje.

Tal vez no pase por un sistema táctico u otro y ni siquiera por quién forma parte del once titular; ni tampoco si tal o cual juega por derecha o por izquierda; y ni tampoco con uno o otro delantero.

El equipo tuvo un arranque furioso, jugando con una intensidad impropia para un comienzo de la temporada. Apoyado en una hinchada que creyó en el mensaje que se les transmitió desde adentro del club por todos sus protagonistas. Pero la Primera Nacional no es una carrera de 100 metros, por el contrario en una de largo aliento. Por lo que el esfuerzo futbolístico, físico y mental está pasando factura.

Quilmes se quedó sin fuerzas en un tramo clave de la temporada. Lo que intenta el DT no sale, los jugadores no responden. El panorama previo a Chacarita es de sumo riesgo, ya que una derrota lo alejaría a 8 puntos del líder e incluso con un par de resultados en contra, en la misma fecha hasta podría caer de los clasificados al Reducido.

No es la final. En caso de ganarle al Funebrero no se termina esta historia y desde lo numérico deberá seguir sumando para poder llegar al primer puesto: el objetivo que se puso este grupo, sin dejar de reconocer que se trataría de una inyección de batería enorme para un equipo que se quedó sin pilas.

No debería ser el final. El DT Mario Sciacqua es el entrenador ideal para este momento del equipo. Con errores y mucho esfuerzo intenta recuperar el rumbo perdido. El torneo ya está en un momento de definiciones. Hay que seguir confiando y apostando a que el equipo de las primeras fechas volverá el sábado al Centenario.

POR: SEBASTIÁN KERLE

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