«Fitch proyecta ahora una suba de la inflación en Argentina de 27,5% para todo 2018 con motivo del traslado a precio de la devaluación del peso, lo que perjudicará el salario real y la confianza, mientras que el ajuste fiscal y monetario pesará en el consumo y la inversión», indicó la calificadora de riesgo en un documento en inglés difundido hoy en su web.
La firma, por lo tanto, determinó «reducir el pronóstico de expansión del PBI de 2,6 a 1,3 por ciento» en virtud del «continuo debilitamiento y volatilidad en el ritmo de crecimiento».
«El acuerdo del país con el Fondo mitiga el riesgo financiero local luego del daño en la confianza por parte de los mercados, lo que respalda la calificación ‘B’ y de panorama ‘estable’ de Argentina», resaltó la agencia.