Una gran cantidad de vecinos de Quilmes Oeste se ha congregado en los últimos días para manifestar su malestar por la tala de árboles del casco histórico ubicado en el radio de Avenida La Plata-12 de Octubre-Madame Curie -Corrientes conocido como Campos del Plata, un sector que fue preservado desde hace tiempo por considerarse un espacio verde especial.
Desde hace aproximadamente dos semanas, una importante cantidad de maquinaria y recurso humano llegó al lugar para comenzar con una tala y emparejamiento del suelo. Según afirman, en el predio se construirían una serie de canchas de fútbol, pero los lugareños sostienen que la historia del lugar y su importancia actual como espacio verde hacen que la zona esté protegida.
Lidia, una de las vecinas, comentó: «la verdad es muy triste porque es un pulmón de oxígeno para nosotros en el barrio, lo devastaron de una manera muy cruel, a todos nos da mucha tristeza y estamos en desacuerdo».
Agregó que «al principio pensamos que era la Municipalidad porque habíamos visto personal del Municipio podando en los costados, pero luego vimos que llegaron otros camiones a empezar a talar todo. No dieron información los trabajadores, solamente dicen que no están autorizados a hablar, tampoco las sedes donde hicimos las denuncias. Son varios los vecinos que hicieron denuncias, veremos qué sucede».
Por su parte, Edgardo, otro lugareño, precisó: «se hizo la denuncia en Defensoría del Pueblo, en la calle Paz. En principio por el desmonte y la tala, son árboles centenarios, hay ombúes, jacarandás, ceibos y los han talado igual. También por ruidos molestos; no les importó nunca. Es un lugar muy antiguo que tiene una gran historia. Sinceramente es muy extraño todo porque se operó muy rápido, hubo permisos que se dieron muy rápidamente sin hacer ningún estudio ambiental».
Continuó: «el daño ya está hecho, pero hay árboles que están todavía en pie. Los que mataron no son árboles secos, son árboles en vida. Pero los siguen cortando, no les interesa nada. Acá no hablamos que hubo una instancia de evaluación de impacto ambiental, acá simplemente se vendió un pedazo de historia y se empezó a talar sin importar nada. Son 18 mil metros cuadrados y creo que se debería haber preservado como historia de Quilmes y como pulmón de la zona».
