La historia del dueño de un gimnasio de Florencio Varela se hizo pública por su dramático testimonio.
Raúl Gutiérrez estuvo internado dos meses a en el Hospital El Cruce, en terapia intensiva y con respirador articicial.
En medio de la lucha que tuvo que pasar, al hombre le hicieron dos cirugías de pulmón y estuvo cerca de fallecer en varias oportunidades por las complicaciones de salud que pasó. Recién el 9 de agosto, el fisicoculturista abrió los ojos y dejó el respirador.
Después de haberse recuperado, Raúl relató: “pesaba 100 kilos y, por el virus, perdí casi 50. Hoy estoy muy agradecido al Hospital El Cruce. Gracias a ellos, pude volver a estar con mi familia y avanzo día a día”.
Ahora el objetivo es activar de a poco la musculatura respiratoria y ayudar a utilizar de forma eficiente los pulmones. El especialista encargado de este caso explicó: “estamos estudiando qué secuelas deja el virus y los tratamientos recibidos. Raúl ahora hace terapia kinesiológica”.