Un grave altercado se produjo entre los familiares de una chica con discapacidad y un chofer de la Línea 22 que se rehusó a abrir la puerta por donde podrían haber subido una silla de ruedas.
Los mamá de la pequeña de tres años con problemas motrices expresó: “lo que viví con mi hija de 3 años con discapacidad que tiene parálisis cerebral, problema por el cual no camina y usa un carrito especial por lo cual siempre viajo con el correspondiente pase sin ningún tipo de problema”, publicó realidadsurconurbano.com.
“Al subir al colectivo siempre muestro el carnet de discapacidad y me abren la puerta de atrás porque por adelante es imposible”, detalló la mujer y agregó: “volvía del médico en Avellaneda con mi hija y mi mamá y al tomar el colectivo de la línea 22 interno 345, el chofer se negó a usar la puerta del medio”.
“No me quiso abrir la puerta de atrás diciéndome de mala manera que no le abría a nadie esa puerta, tuve que cerrar el carrito y subir igual, siendo que es la obligación y derecho de mi hija poder subir por la puerta especial”, agregó.
Del mismo modo, añadió que “al llegar a la parada donde siempre me espera mi cuñado, éste le pregunta al chofer por qué no me abrió la puerta de atrás y el conductor reaccionó de mala manera, empujando a mi mamá y tirando piñas a mi cuñado”.
Finalmente, aseguró: “hicimos la denuncia correspondiente en la comisaria y presentando quejas en la empresa por lo cual no me dieron ninguna respuesta, lo único que recibí del jefe de la empresa es disculpa nada más”.
