En el ensueño penúltimo del
amado Cerati
¡No veniste a verme!
Yo no sé que paso
te espere, para venir a
despertarme
Pero yo no sé
que pasó
no hubo ninguna señal
de tu venida
a mi habitación.
Si no te vi esta vida
te veré
en la otra vida.
Pero Dios me da un trabajo
más, más era puramente
tenerte mujer milagrosa
porque Dios entiende
mi excepción, por lo cual
me dará un trabajo
más, más tuyo
mujer milagrosa.
Allí vas a encontrarme
en cualquier lugar
y ya nada va a ser casualidad.
Porque tu misteriosa
presencia sagrada
me alegrará porque
a cada segundo estaré más
cerca tuyo mujer milagrosa.
Cintia Villalba