Con la cuarentena aumentó la matrícula de la UNQ

Un 40% más de alumnos se inscribieron a las clases de posgrado de la Universidad de Quilmes durante la pandemia y un 15% más de alumnos consiguieron presentar sus trabajos finales, defender sus tesis y egresarse.

Un 40% más de alumnos se inscribieron a las clases de posgrado de la Universidad de Quilmes durante la pandemia y un 15% más de alumnos consiguieron presentar sus trabajos finales, defender sus tesis y egresarse.

La secretaria de Posgrado, Nancy Díaz Larrañaga, dijo que los desafíos presentados por la cuarentena fueron salvados “de la mejor manera” a la vez que la casa de altos estudios amplió su oferta académica.

 “En términos generales venimos cumpliendo con los mismos procedimientos que realizábamos antes de la pandemia. La virtualización complejizó algunas tareas, como la inscripción de los estudiantes. Tradicionalmente, por toda la documentación que deben entregar, es una actividad que requiere de una alta carga de presencialidad. Sin embargo, lo pudimos resolver de la mejor manera. El condimento que no podemos dejar de subrayar es que hubo un 40% más de alumnos que el año pasado”, dijo Larrañaga en una entrevista al portal universitario.

  “La gente se anotó más a todo, tanto a carreras como a cursos y materias. Había personas que venían cursando dos asignaturas y decidieron ir por tres o por cuatro por trimestre. Quizás tuvieron más tiempo disponible, es difícil de saberlo en cada caso. El otro aspecto es que realizamos acuerdos con otras instituciones y abrimos carreras nuevas. Hay un diploma que diseñamos luego de un convenio con el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación y con la Universidad de Jujuy, que contó con más de 500 inscriptos”.

  Sin embargo, hubo algunos inconvenientes: “los trámites se tornan un poco más largos porque requieren de diferentes niveles de autorización. Lo que antes se resolvía con una firma, ahora requiere de rubricar, por lo menos, tres o cuatro documentos. La Universidad aun no cuenta con la firma digitalizada, ni expedientes o legajos electrónicos de los alumnos (tanto grado como posgrado). En este sentido, pienso que la UNQ tiene un desafío que enfrentar y que resolverá a corto plazo sin lugar a dudas”.

  “Creo que hay que aprovechar las virtudes de la digitalización, porque se pueden solucionar muchos trámites de una forma más expeditiva, con mayor eficacia. Sin embargo, hay que sacarse el sombrero, nuestra casa ha respondido de forma muy satisfactoria. La Universidad está a la altura de las circunstancias, es muy flexible y sus recursos humanos siempre están bien predispuestos. Pareciera como si las cosas fluyeran aquí”.

Compartir