Un cuidador hospitalario del Isidoro Iriarte llevó a la literatura sus experiencias en la guardia del nosocomio local y la primera de sus novelas llegará a un teatro porteño en diciembre.
Los dos libros del joven escritor Ariel Aloi relatan la vida de pacientes que atraviesan momentos de crisis y si bien el cuidador hospitalario reconoce las referencias a su trabajo cotidiano, aclara que buscó una vuelta de tuerca para que las tragedias relatadas se conviertan en un relato atractivo para los lectores.
Aloi, vecino de Gerli, tiene una carrera corta dentro de la literatura pero ya obtuvo varios logros.
Si bien la escritura lo acompañó desde pequeño, fue en 2014 y gracias al respaldo de su amigo escritor Rubén Sacchi que empezó a gestarse la posibilidad de una nouvelle –novela corta-, en coincidencia con su ingreso al Iriarte.
«Aviones de papel está basado, principalmente, en el problema de psiquiatría que hay en el Hospital, que es cada vez más visible a partir de la resolución de la Ley Nacional de Salud Mental, a partir de la que todos los pacientes van primero a un nosocomio público, desde donde luego son derivados. Yo no tenía pensado publicar algo pero fue bastante la insistencia y salió el libro».
La primera novela cuenta, precisamente, la historia de un paciente psiquiátrico que planea la fuga del nosocomio en un avión de papel que construye él mismo.
Si bien el autor tuvo «temor» por la recepción del libro, la obra tuvo una buena aceptación y hasta se editó en México, a donde viajó para presentarlo librerías y escuelas.
La realidad de los pacientes psiquiátricos «es igual en todos lados. Se rige a partir de la concepción del abandono, salvo en el caso de las familias que dan una contención muy marcada. Yo llamo, incluso en el libro, como depósitos a los manicomios».
En ese sentido, Aloi dijo que preocupa un reciente decreto que frena la ley de Salud Mental, considerada modelo, que se creó para eliminar el concepto clásico de manicomio
«Ahora mismo en el Hospital de Quilmes hay cinco o seis pacientes psiquiátricos con los cuales uno tiene que convivir y aprender. No es lo mismo un paciente que va por un dolor abdominal o un resfrío que un paciente psiquiátrico. Al no haber condiciones para que esta ley se haya implemente, se hace un trabajo de voluntarismo. Nosotros tratamos de hacer contención y ni siquiera es nuestro trabajo, lo hacemos porque no queda otra. Y a partir de eso uno va tomando relación con el padecimiento del paciente y aprendiendo. Eso es lo más increíble. Hasta se generan amistades».
«Uno nota el cambio desde que entran hasta que se van, incluso sin un tratamiento sistemático, porque lo único que le damos es cordialidad».
En tanto, «la adaptación al teatro fue muy sencilla porque hay mucho diálogo, no sabía cómo tomar la perspectiva del que tiene un padecimiento mental sin tomarlo desde el diálogo».
Las edades de la lluvia, el libro que se editó este año, transcurre en una guardia hospitalaria, por lo cual las referencias al trabajo de Aloi en el Iriarte son aún más directas.
Según el autor, «tiene mucho realismo pero es otra clase de historia. Es la etapa final de un paciente terminal con leucemia. Toma esa parte de realismo trágico y después aparece lo fantástico, que es cómo él, Joaquín, lo va viendo. Lo que hice fue tomar todo lo que veo a diario en el Hospital, pero darlo vuelta totalmente».
Dos funciones en el Auditorio Losada
Con la dirección y adaptación de Laura Lasalvia, actriz y directora uruguaya, la obra Aviones de papel se estrenará los sábados 2 y 9 de diciembre (dos únicas funciones del año) en el Auditorio Losada, Corrientes 1551 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
En la puesta en escena también participa el músico uruguayo Nicolás Zurdo Pérez, encargado de la ambientación musical original de la obra.
Actúan Julia Goldberg, Fabián Guzmán, Matias Palacio, Wanda Rzonscinsky e Iván Stilman
