Argentino de Quilmes ayer cumplió y jugó su último partido en el campeonato. Se despidió la C con una sonrisa de punta a punta, porque el equipo de Pedro Monzón ya había alcanzado su objetivo la semana pasada.
Se tomó un mate durante el partido. Argentino culminó su participación en la categoría: los jugadores del Criollo ya armaron las valijas y ansían que llegue el inicio de la B Metro en agosto.
Relajado e inconexo, el equipo de Pedro Monzón no hizo un buen partido contra un Berazategui, que jugó con la cabeza en lo que sucedía en General Rodríguez y en Merlo.
El Criollo alcanzó su objetivo y aún le dura la emoción tras los intensos festejos que se desataron tras haber alcanzado la gloria deportiva.
El encuentro le sirvió completamente a aquellos jugadores que han sumado pocos minutos en esta temporada: Ramón Borda (quiere ganarse la consideración del entrenador); Sebastián Moschini (que debutó en el arco del Mate); Guillermo Báez (que no piensa en el retiro y sueña con seguir en el plantel); Gustavo Escobar (que busca recuperar terreno) y Matías Irala (busca sumar minutos y demostrar que está para jugar).
El Mate le puso fin a una magnífica temporada, ganó cruciales partidos y supo defender la punta cuando se la arrebató a Dock Sud (ganó con un golazo de Franco Cristofanelli) en ese partido que quedará en el recuerdo de muchos en Avellaneda.
El Criollo es de la B Metro y su campaña forma parte del trofeo que alzó este grupo de jugadores.
deportes@elsolnoticias.com.ar
Fernando Martini
