La Diócesis de Quilmes conmemoró su 47º aniversario de creación y la ordenación episcopal de su primer obispo, Jorge Novak, en una emotiva celebración. «Hace 47 años, en este mismo altar, Jorge Novak se convertía en obispo», recordó Carlos Tissera durante la misa que tuvo lugar el martes pasado.
Durante la ceremonia religiosa, se dedicaron oraciones especiales a los educadores: «En este mes, en el que celebramos el Día del Maestro, el Día del Profesor y el Día del Estudiante, valoramos la crucial labor de los docentes en nuestra sociedad. Jesús, nuestro modelo, nos llama a superar la rutina y la monotonía, a vencer el desaliento y el cansancio, y a aventurarnos ‘mar adentro’, confiando en su presencia», compartió el obispo de Quilmes en su inspiradora homilía, mientras expresaba las necesidades de los educadores.
En el contexto del aniversario de la diócesis, el Obispo Tissera expresó su agradecimiento a Dios «por ser parte de esta Iglesia particular y por seguir el camino sinodal, tal como lo soñó Novak, como una verdadera Iglesia de Jesús».
Tras la misa, la Vicaría de Educación de la diócesis otorgó el reconocimiento «Padre Obispo Jorge Novak al educador» a aquellos individuos elegidos en cada comunidad educativa «por dejar una marca a través de su compromiso diario con la educación». El obispo de Quilmes expresó su alegría por aquellos que fueron honrados por sus colegas y compartió los saludos del Padre Obispo Eduardo Redondo, Auxiliar de la diócesis, quien se encuentra en Roma cursando su formación para obispos novatos.
La misa y la entrega de menciones contaron con la presencia de Adrián Álvarez, presidente del Consejo Superior de Educación Católica (CONSUDEC), y Leonardo Gómez, Inspector Jefe de educación de la Región 4 de DIEGEP.
