El sector turístico cerró el 2024 con otro dato preocupante: la cantidad de viajeros hospedados en el país volvió a caer en diciembre, registrando una baja del 3,3% en comparación con el mismo mes del año anterior, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
Con este nuevo retroceso, la ocupación hotelera acumuló doce meses consecutivos de caída, una situación que no se veía desde la pandemia de 2020. La tasa de ocupación no superó el 60% en los principales centros turísticos del país, reflejando una temporada de vacaciones de invierno floja y perspectivas negativas para el verano.
Entre los factores que afectan al sector, los especialistas destacan el atraso cambiario y la recesión interna como elementos clave que dificultan la llegada de turistas nacionales y extranjeros. Este contexto ha generado gran preocupación en la industria hotelera, que enfrenta un escenario desafiante para 2025.
