Cualquier tiempo pasado fue mejor. Este es un refrán muy habitual en los países de habla hispana, ideal para los más nostálgicos y que, en la actualidad, se puede aplicar en diferentes campos. Ahora que la tecnología nos invita a avanzar y a adaptarnos a nuevas modas, hay quienes optan por echar la vista atrás. El sector del juego es uno de los que muestran esa tendencia de forma más evidente, pero no el único, combinando las innovaciones con tradición y clásicos que, aunque se adaptan al paso de los años, siguen manteniendo la esencia del pasado.
Juegos que mantienen la esencia tradicional
Encajando sus actividades en los nuevos formatos, como pueden ser en celulares o computadoras, hay pasatiempos que siguen apostando por la sencillez, alejándose de la complejidad en su funcionamiento y de gráficos imposibles más propios de grandes producciones audiovisuales. Ejemplo de ello son los puzles, los sudokus y hasta incluso algunos juegos de cartas. Si bien es cierto que han hecho esfuerzos para no diferir demasiado de las nuevas maneras de entretener, poco o nada tienen que ver con títulos de videoconsolas que se decantan por la espectacularidad visual.
Otro caso ilustrativo de lo comentado son las prácticas propias del casino online, con la ruleta como uno de los máximos exponentes por popularidad y transformación. Ha conseguido llevar el mecanismo circular que causó furor en los salones especializados a todo tipo de pantallas, brindando una experiencia más novedosa que a la que los usuarios estaban acostumbrados. Más tipologías de apuestas, partidas sin importar el momento ni el lugar o la opción de tener la vivencia junto a un crupier en directo mediante el streaming son tres de los puntos más llamativos que se pueden encontrar.
Por otro lado, parte del éxito duradero de estos juegos clásicos es el modelo de entretenimiento. Gran parte de la oferta reciente y más llamativa requiere de compromiso, partidas largas y regularidad en las acciones. Algunos de los ejemplos mencionados en el párrafo anterior solamente necesitan de un clic y de pocos segundos para ofrecer una diversión rápida, que ocupe pocos minutos, ya sea conectándose a la red con otros usuarios o no. Este es uno de los cambios más evidentes y significativos que se han ido produciendo en los últimos años en el sector.
Las consolas retro, todo un éxito
Una de las modas recientes de nuestra sociedad vinculada a los videojuegos y al entretenimiento es el auge de las consolas retro. Se trata de aquellos dispositivos, de al menos hace 20 años, que llenaban de entretenimiento los tiempos muertos y que ahora vuelven al mercado con gran fuerza. Hay quienes buscan originales, auténticas piezas de coleccionista, pero también hay compañías que han lanzado algunas consolas remasterizadas en forma de nueva colección, mejorando en cierto modo la calidad gráfica y de sonido y ofreciendo una selección de los títulos más icónicos.
Sin duda alguna, esta es una opción de conectar con el pasado, recordando aquello que en su día causó furor. Del mismo modo, sirve para reivindicar juegos clásicos que han escrito parte de las páginas doradas de la historia del sector y evitar que así caigan en el olvido más absoluto. PlayStation, Sega o Nintendo son tres de las grandes marcas reconocidas internacionalmente que han apostado fuerte por ese fenómeno, combinando la innovación propia de los tiempos actuales con la recuperación de referencias del pasado que fueron top ventas.
Una tendencia más allá del juego
Echar la mirada atrás no es un aspecto único del sector del juego: que el pasado siempre regresa se puede ver en numerosas industrias. Ejemplo de ello es la música a través de los vinilos y CD, o las películas clásicas que vuelven a programarse en algunas salas de cine. Todo apuntaba a que, con las nuevas plataformas de streaming, que permiten infinidad acciones, su demanda quedaría más que cubierta, pero la realidad ha demostrado que no es exactamente así y que hay público que todavía se decanta por la tradición, combinada o no con las nuevas tecnologías.
