La catedral de Notre Dame de París deslumbró este viernes al mundo al presentar su renovado «resplandor», culminando cinco años de intensos trabajos de reconstrucción tras el devastador incendio que la consumió en 2019. La reapertura oficial, prevista para los próximos días, marcará el retorno de esta icónica obra del arte gótico como uno de los principales destinos turísticos y culturales del mundo.
En una visita a la histórica catedral, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, recorrió los espacios restaurados y expresó su admiración por el trabajo realizado: “Han hecho lo que parecía imposible”, declaró, dirigiendo sus felicitaciones a los equipos de arquitectos, artesanos y obreros que participaron en el proyecto.
El incendio, que se produjo el 15 de abril de 2019, causó la destrucción de gran parte de la estructura, incluyendo su emblemática aguja. Sin embargo, los esfuerzos conjuntos del gobierno, la Iglesia y organizaciones internacionales permitieron la reconstrucción de la catedral respetando sus diseños originales y utilizando técnicas tradicionales.
A medida que se acerca la fecha de reapertura, se espera una afluencia masiva de turistas y fieles que volverán a recorrer la nave central, las capillas y los tesoros de esta joya arquitectónica. La catedral de Notre Dame, además de su importancia histórica y espiritual, se erige nuevamente como un símbolo de resiliencia y unidad para el pueblo francés.