Pelear el descenso no es algo agrabale para ninguna institución. El plantel de Berazategui se acostumbró a ese hecho: a jugar con la urgencia, a especular resultados y a pensar en lo que sucede con los rivales directos.
El Naranja logró el objetivo: salvarse del descenso pero no puede aliviarse. El entrenador tiene mucho trabajo y debe darle una identidad al equipo.
El Naranja mañana se medirá con Deportivo Merlo en el Norman Lee, en un choque que promete (el partido comenzará a las 15.30 y el juez que impartirá justicia será Cristian Benítez).
Es que el Charro aspira a meterse en el Reducido. Tiene los mismo puntos que Cañuelas pero lo que lo que está dejando afuera del Octogonal es la diferencia de gol que mantiene con el Tambero.
La cuestión es que en el campeonato entrante, Bera arrancará muy comprometido con el descenso (comenzará el torneo ubicado en zona de descenso).
Por eso, los dos cruces que restan en este torneo serán cruciales para que la ADB pueda sumar de a tres y así engrosar el promedio.
El equipo del Búfalo Szeszurak jugará la próxima temporada en la Primera C pero es evidente debe mejorar mucho en el juego para lograr resultados que necesita.
Nuevo desafío: mejorar el juego y ganar lo que queda
Los de Guillermo Szeszurak consiguieron el objetivo y se salvaron del descenso pero no todo puede ser alegría para este plantel que sabe que lo se viene puede ser un calvario.
