«Soy inocente» fueron las palabras que dijo ante los jueces del Tribunal Oral 4 el único acusado del crimen de un vecino apodado «Boli» en la localidad de Berazategui luego de escuchar el pedido de prisión perpetua que realizó el fiscal de juicio en el debate, que finalizó con la instancia de alegatos. Por su parte, el defensor particular requirió la libre absolución y la semana próxima se conocerá el veredicto y la eventual sentencia.
Para el fiscal Claudio Pelayo quedó acreditado que el procesado, Sergio Espinoza, fue el autor del crimen de Carlos Torres en una vivienda de 25 y 163 el 20 de diciembre de 2014 alrededor de las 18.30: «quedó comprobado no por incriminación directa pero sí por prueba pericial que el encartado junto a otros sujetos planificaron como iba a ir a matar a Boli y así lo hicieron en esa jornada».
El fiscal sustentó su pedido en los dichos de los testigos como en el de los peritos que declararon en el juicio oral; con relación a este último punto ayer compareció por videoconferencia una perito balística: «hubo un acuerdo para matar a Boli; por medio de cuestiones objetivas se acreditó la autoría penalmente responsable de Espinoza en los hechos que se le endilgan y esto es irrefutable», indicó Pelayo. Fue así que en virtud a la figura legal de «homicidio agravado por la participación premeditada de dos o más personas en concurso con empleo de arma de fuego» fue que pidió que se condene a Espinoza a la pena de prisión perpetua.
A su turno, el defensor particular, Antonio Solivaret, no compartió el criterio de la contraparte y agregó que «no hay un solo testigo que haya sindicado en este juicio a Espinoza como el responsable del crimen de Torres, no hay certeza ni elementos para arribar a un veredicto de condena, nadie incriminó a mi ahijado procesal y esto lo reconoció el propio fiscal que es el encargado de la acusación».
Vale recordar que el imputado fue detenido en una finca de la localidad de San Rudecindo -en Florencio Varela- tiempo después del crimen y se le secuestraron armas, uniformes de policías, municiones y handies en el inmueble allanado.
«Hay una ausencia total de pruebas, no alcanza con lo pericial, es por tal motivo que solicitó la libre absolución de mi cliente», finalizó Solivaret.
Los jueces Andrea Calaza, Alberto Ojeda y Mario Caputo pasaron a un cuarto intermedio hasta la semana próxima, cuando den a conocer el pronunciamiento del Tribunal Oral 4.
