La cierta posibilidad de un aumento de impuestos a la cerveza de un 8% a un 17% generó preocupación en la industria, porque generará un incremento en los costos de producción y valores de venta de una de las bebidas más populares del país, especialmente, en los sectores más humildes. Y Quilmes, como cuna de la marca más importante de la Argentina, no está ajena a esta cuestión.
Al respecto, el gerente de Relaciones Institucionales de Cervecería y Maltería Quilmes, Juan Mitjans, fue entrevistado en el programa Buenos Para Nada, que se emite de lunes a viernes de 10 a 12 por FM Sur (88.9) y es conducido por Sebastián Rafanelli. Allí dio su punto de vista sobre el tema, horas después de la magnífica inauguración oficial del Jardín Cervecero del Parque de la Cervecería.
«Es una mezcla de sensaciones, por un lado hacer un evento muy emotivo y muy lindo para nosotros, como el Jardín Cervecero para la comunidad; pero por otro lado sorprendidos porque el aumento de impuestos internos que está contemplado en la reforma tributaria impacta muy duro en la industria cervecera lo que dictaminó la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados».
Mitjans dijo que «en un principio, el ministro Dujovne había anunciado el aumento de impuesto para el vino y para la cerveza y después, cuando entró el proyecto tuvimos la posibilidad de hablar con los funcionarios por el perjuicio que significaba para toda la cadena de producción de la cerveza y que no se alineaba con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, que dice que hay que valuar las bebidas de acuerdo a su graduación alcohólica y la cerveza es la que tiene menos graduación alcohólica. El proyecto que ingresó hace 3 semanas a la Cámara de Diputados no contemplaba ni un aumento de impuestos a la cerveza ni al vino, lo que nos sorprendió fue que sin avisarnos lo volvieron a poner, pero solo a la cerveza, ni al vino, ni al champagne, lo cual nos sorprende».
El gerente de Relaciones Institucionales de CMQ aseveró que «es una medida sumamente discriminatoria para la industria cervecera y agrava una situación tributaria que ya existe, porque el vino y el champagne, que tienen tres veces más de graduación alcohólica, no pagan y la cerveza va a pagar más todavía. Esto va a generar una distorsión en el mercado donde se va a migrar el consumo y va a impactar en los precios obviamente porque son productos sustitutos».
Y agregó: «si es un tema de salud pública, como está argumentando el Gobierno, va totalmente en contra de lo que dicen los estándares internacionales. Esto le pega de lleno a la industria cervecera, que es federal y tiene muchísimo empleo directo e indirecto en todas las provincias del país y con un plan de inversiones que es mucho mayor a cualquier industria de consumo masivo en Argentina».
Más allá de eso, Mitjans se esperanzó: «no queremos ser pesimistas, no está todo dicho, es un dictamen de la comisión de cabecera que es la cámara de Hacienda, esto tiene que ir al recinto la semana que viene. En su momento, cuando planteamos este tema, hemos sido escuchados por el Poder Ejecutivo, estamos hablando con los legisladores y la verdad que estamos planteando estos argumentos que son irrefutables. Nos hubiera gustado que si esto ya estaba planificado nos hubieran avisado antes para poder por lo menos exponer nuestra posición».
Finalmente, el gerente de RR.II. de la empresa expresó: «Cervecería Quilmes es pionera, es líder de mercado y a pesar de que en los últimos 10 años el consumo de cerveza per cápita venía estancado, la compañía el año pasado lanzó un plan de inversiones 2016/2020 de 27 mil millones de pesos para los próximos 4 cuatros, de los cuales ya ejecutó casi el 30%. Este año a la industria le ha ido un poco mejor que en los últimos años, pero nuestro plan de inversiones lo hacemos a futuro, a largo plazo, porque confiamos en el país y confiamos en las reglas de juego, pero esto es un cambio terrible y vamos a ver qué pasa, pero esto seguramente va a repercutir y estamos preocupados. Esperemos que esto vuelva a cambiar, apelamos a la apertura de los legisladores para que puedan escuchar nuestros argumentos».
