La Asociación Orígenes manifestó su preocupación por las obras que se están realizando en la estación ferroviaria de Berazategui, planteando que las reformas no tendrían en cuenta aspectos de la historia de este lugar emblemático.
La entidad local, en una declaración que firman Claudio Egisti Staniscia, David Iurescia y Juan Carlos Grassi, recordó que «el 31 de diciembre de 1872 se libró al servicio público el Ferrocarril Buenos Aires al Puerto de la Ensenada, pasando por nuestra querida estación de Berazategui, siendo esta fecha un hito fundacional en la historia de nuestro partido», según estimaron.
«En pocos días se cumplirán 145 años de la primera vez que el ferrocarril llegó a Berazategui. Los que pasan día a día por la estación ven a los obreros trabajando en las obras complementarias de la electrificación, como entre otras, son la elevación de los andenes», consignaron desde Orígenes.
«El progreso llega a nuestra estación con modificaciones, pero creemos que se debería conservar lo máximo que sea posible de la estructura original de la edificación histórica -reclamaron-. Al pasar por el lugar en estos días, vimos que los pilares que sostenían el cartel de cemento con el nombre de nuestra ciudad, yacen arrumbados en el piso, y el característico cartel ha desaparecido de la vista. Esta situación preocupa particularmente a la Asociación Orígenes de Berazategui, que vela desde 1993 por la protección de nuestra historia y nuestro patrimonio», destacaron desde la reconocida institución local.
«Por tal motivo solicitamos un compromiso por parte de Ferrocarriles Argentinos y de la empresa constratista que realiza estas obras para que el cartel que desde hace tantos años identifica y es un hito de nuestra ciudad, vuelva a ser colocado en su lugar al finalizar los trabajos en el andén», insistieron.
Cabe recordar que el origen del nombre de la estación se debe a don José Clemente Berasategui, quien donara las tierras para la estación con la condición de que llevara su nombre, como era usual en la época.
El primer jefe de la estación fue Juan Wilches, quien se ocupaba no solamente de la estación Berazategui, sino también de las estaciones Godoy (actual Plátanos) y Conchitas (actual Hudson), viajando en el tren y realizando el despacho de cargas, encomiendas y boletería en cada una de ellas y regresaba en caballo a la estación inicial.
