La Suprema Corte de Justicia dispuso la creación del Registro de aspirantes a ingresar al Poder Judicial de la Provincia de Buenos Aires, en el marco de la Ley 14.783. La reglamentación constituye una conquista enorme del colectivo travesti trans, del movimiento transfeminista y de la Asociación Judicial Bonaerense (AJB), que desde hace años levantó esta bandera y exigió la implementación al máximo Tribunal.
En 2018, el sindicato presentó un proyecto de regulación que establecía como piso el cupo del 1 % que establece la Ley y otras propuestas tendientes a garantizar la inclusión laboral travesti trans, con la adopción de medidas positivas puntuales para evitar la discriminación, tales como la no exigencia de antecedentes penales, ni estudios formales completos.
En 2019, la Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans (FALGBT) acompañó el proyecto con una presentación a la Suprema Corte, donde se reclamó la incorporación del cupo y la inclusión travesti trans, destacando la lucha de la AJB y poniendo especial énfasis en la voluntad política del sindicato en la promoción de acciones para la inclusión del colectivo trans en el mundo laboral.
Así también, en las reuniones mantenidas durante el último año con representantes de la Corte para avanzar en la construcción de una agenda de género, la AJB presentó el reclamo de la reglamentación para el ingreso al Poder Judicial de personas pertenecientes a la comunidad travesti trans, solicitando además el ingreso de Gabriela Romanello y otras compañeras que se encontraban prestando funciones de manera precarizada y con la modalidad de pasantías en el ámbito de la administración de Justicia.
«Es un gran logro del sindicato y en particular de la Secretaría de Géneros, que desde hace años ha tomado con fuerza esta demanda y ha incluido el reclamo en cada lucha llevada adelante por el sindicato en materia de género», señaló Débora Bertone como secretaria de Géneros e Igualdad de Oportunidades de la AJB.
«La inserción al mercado laboral de las personas trans es una deuda del Estado que necesitaba una respuesta urgente por parte del Poder Judicial. Una comunidad muy castigada por la imposibilidad de acceso a un trabajo formal y la consecuente negación de derechos fundamentales como la vivienda, la salud y la educación, con un promedio de vida que se mantiene en los 35 años», agregó Bertone.
Una conquista histórica
A partir de la lucha de la comunidad travesti trans y la Asociación Judicial, se hizo realidad la reglamentación del cupo laboral en el Poder Judicial. "Es un gran logro del sindicato y de la Secretaría de Géneros", manifestó Débora Bertone
