Un violento robo ocurrido en una vivienda de Berazategui derivó en la recuperación de un vehículo robado, que había permanecido oculto dos días en la Ribera de Quilmes antes de ser trasladado a un taller clandestino en La Plata. El operativo dejó dos detenidos y puso al descubierto un presunto centro de desarme de autos.
El miércoles, personal del Comando de Patrullas de Berazategui acudió a un llamado al 911 por un asalto en la calle 410A al 1200. Según relató la víctima, durante la madrugada, cuatro delincuentes ingresaron violentamente a su hogar dañando una persiana lateral mientras dormía. Los ladrones revisaron toda la casa y escaparon con dinero en efectivo, electrodomésticos, teléfonos celulares y dos vehículos: un Chevrolet Onix naranja y un Audi A5 blanco, este último equipado con rastreo satelital.
La empresa de rastreo informó que, minutos después del robo, el Audi fue ubicado en la intersección de Italia y Cervantes, en la Ribera de Quilmes, donde la señal se perdió. A pesar de un operativo inicial en la zona, no se obtuvieron resultados inmediatos. Sin embargo, durante la madrugada del viernes, el sistema detectó el vehículo en movimiento nuevamente, esta vez en el partido de Quilmes.
Tras seguir la pista, las fuerzas policiales rastrearon el Audi hasta un taller clandestino ubicado en la calle 66 entre 8 y 9, en La Plata. Allí, durante la vigilancia, interceptaron a dos hombres de 26 y 27 años que salían del lugar en un Peugeot 408. En el vehículo se encontraron chapas patentes del Audi robado, lo que motivó un allanamiento de urgencia autorizado por la Fiscalía Descentralizada N° 3 de Berazategui.
Durante el operativo, se recuperó el Audi A5, que tenía chapas patentes falsas, y otro vehículo similar sin dominio colocado. Además, se encontraron documentos de la víctima y tres teléfonos celulares. Según la investigación preliminar, el taller operaría como un centro de desarme y reacondicionamiento de vehículos robados, destinados al mercado ilegal.
Los detenidos, oriundos de La Plata, serían integrantes de una banda que opera bajo la modalidad de «entraderas». Ambos quedaron a disposición de la justicia, mientras se investiga la participación de otros posibles miembros de la organización delictiva.