Javier Milei, líder libertario argentino, quien calificó a Petro de «asesino terrorista» en una entrevista televisiva.
La tensión diplomática entre Colombia y Argentina alcanzó un nuevo punto crítico con la decisión del presidente colombiano, Gustavo Petro, de llamar a consultas al embajador en Argentina, Camilo Romero, y solicitar la expulsión del representante argentino en Bogotá, Gustavo Dzugala. Esta medida fue una respuesta directa a las recientes críticas de Javier Milei, líder libertario argentino, quien calificó a Petro de «asesino terrorista» en una entrevista televisiva.
La escalada de tensiones entre ambos países se remonta a la asunción de Milei como presidente argentino, y se intensificó tras los intercambios de declaraciones provocativas. Esta no es la primera vez que Romero es llamado a consultas por Petro; la anterior ocasión fue el 26 de enero de 2024, cuando Milei lo denunció como un «comunista asesino que está hundiendo a Colombia».
Petro, reconocido como el primer presidente de izquierda en Colombia y ex guerrillero del grupo M19, respondió a las acusaciones de Milei citando la frase «Los socialistas son malas personas», atribuida a este último, y comparándola con una declaración similar de Hitler. Esta serie de intercambios retóricos ha exacerbado las tensiones entre los dos países, llevando a medidas diplomáticas drásticas por parte del gobierno colombiano.
