Un grupo de investigadores sobre la enfermedad del dengue confirmó la presencia y la expansión en la Provincia de Buenos Aires de tres mutaciones génicas en mosquitos de la especie Aedes aegypti, que indican que su capacidad de resistencia a los insecticidas tradicionales va en aumento.
Esta investigación fue llevada a cabo por un equipo interdisciplinario de científicas y científicos pertenecientes al Laboratorio de Neurobiología de Insectos, el Instituto de Investigaciones Fisicoquímicas Teóricas y Aplicadas y el Centro de Estudios Parasitológicos y de Vectores (CEPAVE).
El estudio fue financiado por la convocatoria Ideas Proyecto de la Comisión de Investigaciones Científicas (CICPBA) y también por un proyecto Salud Investiga (que hasta 2023 otorgaba el Ministerio de Salud de la Nación) donde intervinieron la Dirección de Epidemiología del Ministerio de Salud de la Provincia y el Centro Nacional de Diagnóstico e Investigación en Endemo-Epidemias (CENDIE).
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que todas las campañas de control tienen que tener en cuenta la situación de resistencia del mosquito para el diseño racional de las políticas públicas”, afirma bióloga y doctora en Neurociencias, Sheila Ons, directora del Laboratorio de Neurobiología de Insectos y también de este proyecto de investigación.
El primer objetivo del trabajo fue saber si en la Provincia había resistencia a insecticidas, para lo cual realizaron estudios genéticos. “Esos trabajos nos permitieron descubrir que sí, que hay resistencia a insecticidas, expandida en el territorio de la Provincia, sobre todo en el Area Metropolitana de Buenos Aires (AMBA)”, detalló en la Agencia de Noticias Científicas de la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ).
Para llegar a esa conclusión, hubo varios pasos previos. “Se colocaron ovitrampas, que son trampas para huevos, en 16 municipios de la Provincia, distribuidas en el AMBA y en Pergamino”, explicó Ons. Se recolectaron un total de 22.123 huevos, que se enviaron una parte al CENDIE y otra al CEPAVE, donde los hicieron crecer hasta tener los adultos.
“Una vez crecidos, nos dieron el material y tomamos 30 adultos por cada uno de estos municipios y extrajimos el ADN de cada uno”, indicó. Luego, con una técnica basada en PCR, buscaron unas mutaciones génicas específicas.
“Se sabe a nivel mundial que hay mutaciones génicas que al Aedes aegypti, en un gen particular, le causan resistencia al insecticida. Entonces la pregunta era: ¿están esas mutaciones presentes en la Provincia de Buenos Aires y en Argentina?”, preguntó Ons, que ya tenía la respuesta: “encontramos que sí”.