En la madrugada del domingo 3 de noviembre, Lucas, un exsoldado que combatió en la guerra de Ucrania, estuvo cerca de perder la vida en un violento episodio en Quilmes Oeste. Alrededor de las 3 a.m., circulaba en moto por la avenida Mosconi y la calle San Juan cuando encontró un Fiat Palio detenido en medio de la calzada. Frente al vehículo, una joven lloraba sentada en la vereda, lo que llevó a Lucas a acercarse y ofrecer ayuda. Sin embargo, la mujer le indicó que no era necesario; parecía tratarse de una disputa de pareja.
Lucas pidió al conductor del Palio, quien se mostraba visiblemente alterado, que moviera el auto para permitir el paso, recibiendo una respuesta hostil. Momentos después, al intentar continuar su camino, Lucas fue interceptado por el Palio, cuyo conductor inició una discusión, criticándole por no haber exigido a otro motociclista que moviera su moto de la vía, como lo hizo con él.
La situación escaló cuando el automovilista comenzó a bloquearle el paso repetidamente. Finalmente, al llegar a un semáforo, el conductor del Palio embistió a Lucas y su moto, atrapándolos bajo el chasis del vehículo y avanzando unos 200 metros en dirección a la avenida Calchaquí. Lucas reaccionó rápidamente, logrando soltarse, aunque sufrió graves heridas en la mano al quedar enganchado en el embrague de su moto.
“Tengo fracturas expuestas en dos dedos, daños en el anular que dejaron expuesto un tendón, y golpes en todo el cuerpo”, relató Lucas, quien requirió cirugía por la gravedad de las lesiones. Tras presentar la denuncia policial, pide la colaboración de cualquier testigo que pueda identificar al conductor del Palio. Pese al impacto del ataque, Lucas asegura que retirará los cargos si el agresor se presenta y asume la responsabilidad de sus actos.