Hacía mucho tiempo que Quilmes no contaba con un potencial ofensivo como el que hoy ostenta el equipo conducido por el entrenador Facundo Sava. Muchas delanteras permanecen en la memoria del hincha de Quilmes: el Indio-Leani-Catalán, Sosa-Blasón y Rufini o mucho más acá y también con el Colorado Sava como DT: Droopy Gómez-Bieler-Canelo.
El tiempo dirá si estos apellidos de ahora serán añorados como los anteriores y mucho dependerá de poder mantenerse durante varias fechas en la pelea por el ascenso, lugar en el que se instaló tras la gran victoria conseguida ante Gimnasia en Mendoza por 3 a 0 con un aplastante rendimiento ofensivo.
Quilmes es el equipo más goleador en su zona y a diferencia de las mencionadas delanteras, no tiene una estructura fija y las formaciones y goles son variados. Por ejemplo juega Pons con Pavone o lo hace Anselmo o se mete Barbieri o aparece Bonetto, desde el banco aporta Blanco y hasta pisa el área Moreno.
El Cervecero no tiene un goleador exclusivo y ahí está uno de sus grandes méritos, cualquiera de los que juegan te pueden marcar un gol, por eso el recambio casi que ni se nota y el poder ofensivo no se resiente si entra uno u otro jugador.
La clave para potenciar sus posibilidades como candidato al ascenso a Primera División estará en conseguir la solidez defensiva, algo que ha mejorado de manera notoria en los últimos partidos con la llegada de Matías Villarreal al mediocampo para jugar junto a Adrián Calello. El fondo con línea de tres, de cuatro o de cinco, consiguió darle más seguridad a un arquero como Rodrigo Saracho que recuperó la confianza.
Si consigue ese equilibrio entre lo que tiene arriba y lo que puede ofrecer atrás entonces sí, estará para grandes cosas. Mientras tanto los pies sobre la tierra y a disfrutar de la capacidad goleadora que tiene el equipo, porque arriba te mata.
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Sebastián Kerle
