El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, tomó medidas para asegurar el pago completo de los salarios de los docentes de la provincia, incluyendo las sumas que el Gobierno Nacional no transfirió. Ante la falta de respuesta de la administración de Javier Milei, Kicillof desembolsó la totalidad de los sueldos para evitar que los trabajadores de la educación pública sufrieran una disminución del 10%.
Según Roberto Baradel, titular del SUTEBA, la provincia destinó 8.300 millones de pesos por el Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID) y 6.200 millones en otros componentes, sumando un total de 14.500 millones de pesos para garantizar los salarios de más de 350 mil trabajadores de la educación.
El Frente de Unidad Docente Bonaerense se declaró en estado de alerta y movilización para defender los salarios docentes y el financiamiento necesario para la educación pública. Se enviará una carta documento exigiendo las transferencias correspondientes al Ministerio de Capital Humano y al Ministerio de Economía, dirigido por Luis Caputo.
El recorte de transferencias de fondos asignados a educación se percibe como un ataque a la educación pública y a la docencia en todo el país. El gobierno provincial ha asumido la responsabilidad de garantizar los salarios, pero se espera que el Gobierno Nacional cumpla con su obligación legal de transferir los fondos correspondientes.
La Dirección General de Cultura y Educación de la provincia advirtió sobre posibles conflictos gremiales si el Gobierno Nacional no garantiza el financiamiento adecuado para el inicio de clases. Mientras tanto, se mantiene el estado de alerta y movilización, y se espera una convocatoria a paritarias para discutir estos temas crucial.
