Después del resonante inicio del juicio oral, ayer martes se desarrolló en el Tribunal Penal Número 1 de Posadas la segunda audiencia del proceso que busca comprobar las culpabilidades de Germán y Sebastián Kiczka, imputados por “tenencia, facilitación y distribución de material de explotación sexual infantil (MASI), agravado por ser las víctimas menores de 13 años”, además de un cargo de abuso sexual.
Ambos acusados permanecen detenidos en la Unidad Penal de Cerro Azul de manera preventiva desde agosto pasado. Durante la audiencia, se presentaron nuevas pruebas y testimonios que buscan esclarecer la magnitud de los delitos y la participación de los imputados en los hechos denunciados.
El proceso judicial ha generado gran expectativa y preocupación en la comunidad, dado el impacto de los delitos imputados y la gravedad de las acusaciones. Se espera que en las próximas audiencias se continúe con la exposición de peritajes y declaraciones clave que podrían ser determinantes para el veredicto final.
Mientras tanto, organizaciones de derechos humanos y protección de la infancia siguen de cerca el desarrollo del juicio, exigiendo justicia para las víctimas y mayor rigor en la persecución de este tipo de delitos.
El tribunal deberá analizar todas las pruebas presentadas antes de tomar una decisión final sobre la responsabilidad de los acusados, en un caso que ha conmocionado a la sociedad y reavivado el debate sobre la protección de los menores ante delitos de explotación sexual.
