Nuevamente el temor por la inseguridad vuelve a sacudir a los vecinos de la zona este del distrito. En esta oportunidad, lugareños fueron atacados por tres delincuentes armados, que los despojaron de varias pertenencias.
Ocurrió el domingo en horas de la tarde, cuando parte de una familia se encontraba en el ingreso a su casa, en la vereda de la misma.
En un momento, se acercan tres sujetos, dos de ellos simulando ser pareja y un tercero detrás, escondido. Al llegar al encuentro de esta familia, los atacan para asaltarlos. Los redujeron, les sacaron zapatillas, documentos y otras pertenencias para luego escapar con el auto.
Momentos más tarde, los damnificados hicieron la denuncia correspondiente y horas más tarde encontraron el vehículo descartado en una zona periférica del distrito.
Mercedes, hija de uno de los damnificados, dialogó con El Sol y comentó: “según sabemos, los tipos cometieron un robo con el auto y después descartaron el auto en una zanja. Además robaron todo lo que había en el auto, bolsas de verdulería, anteojos de mi papá. Hasta el rosario que tenía colgado en el espejo retrovisor se llevaron”.
En cuanto al estado de salud de los damnificados, afirmó: “por suerte no les hicieron un daño físico, fue más que nada el susto porque todo fue muy violento”.
Al respecto de los asaltantes, describió que “eran hombres menores de 30 años, encapuchados, delgados, de estatura mediana. Según comentaron decían que por lo que habían escuchado parecía que alguno de ellos era policía, por la forma de manejarse. A mi mamá no le hicieron nada. Le sacaron una campera, le sacaron la llave de la casa”.
Describió además que “hemos tenido hechos similares. Hace unos dos años le robaron a mi hermana en la puerta de mi casa. Jamás los encontraron. Hace un año y medio mi papá estaba entrando a mi casa y una moto nos encara, mi papá sale con el auto y la moto lo persigue hasta la Plaza De La Cruz, se sumó un auto también para perseguirlo hasta que mi papá llega a la comisaría primera. Cuando fueron a hacer la denuncia les dijeron que en la comisaría solamente era para trámites administrativos y que no podían mandar patrulleros. En ese momento algunas autoridades policiales vinieron en persona a pedirnos disculpas. Esa es la seguridad que tenemos, nos prometieron más patrullaje en ese momento y al día de hoy seguimos igual”.
