Fue arrestado en un domicilio privado de Quilmes Oeste tras ser denunciado por tres mujeres que eran catequistas en una parroquia local.
El sacerdote Franco Lütens, integrante del Obispado de Quilmes, fue detenido este lunes por orden del Juzgado de Garantías N° 4 del Departamento Judicial con sede en Berazategui, acusado de haber cometido abuso sexual gravemente ultrajante con acceso carnal, en un contexto agravado por su condición de ministro de culto.
La denuncia fue realizada por tres mujeres que se desempeñaban como catequistas en la parroquia Virgen María Madre del Pueblo, ubicada en Quilmes Oeste. Las causas judiciales se encuentran en trámite desde 2024, y ya habían motivado en su momento que el obispo Carlos José Tissera decidiera el apartamiento de Lütens de toda función pastoral y su traslado a un domicilio privado, cuya dirección fue informada a la Justicia. En ese lugar fue detenido este lunes, tras un allanamiento.
El Obispado de Quilmes emitió un comunicado oficial en el que el obispo Tissera manifestó su “profundo pesar” por el sufrimiento de las personas afectadas y reiteró el compromiso institucional con la protección de niñas, niños, adolescentes y adultos vulnerables.
También informaron que el Equipo Diocesano para la Protección de Menores y Adultos Vulnerables se encuentra disponible para acompañar a las víctimas y sus familias, y que el sacerdote ya no cumple funciones dentro de la Iglesia local desde el inicio de la causa penal.
El caso generó conmoción en la comunidad religiosa y barrial de Quilmes Oeste, donde el cura venía desarrollando su labor pastoral hasta que fue apartado de su cargo. La investigación sigue adelante bajo la órbita del Departamento Judicial de Quilmes.